Principales indicadores en tu área logística

La industria de la logística produce diariamente una gran cantidad de datos provenientes de los procesos de almacenamiento, transporte de pedidos, recolección y empaque, entre otros. De hecho, las empresas que se benefician de las soluciones de análisis de logística a través de indicadores en el área logística para mejorar su rendimiento son las que prosperarán a largo plazo. 

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Por este motivo, para tener mayor visibilidad de la cadena de suministro en tu empresa, debes conocer los principales indicadores en tu área logística, los cuales te ayudarán a identificar variables que podrían afectar tanto la planificación de la demanda, la producción como la distribución de productos. De esta manera, puedes tomar mejores decisiones para anticiparte a los posibles faltantes o exceso de stock o las demoras en la entrega a los clientes.

Los indicadores tienen el objetivo de medir el rendimiento del personal, las ventas, la cantidad de entregas de productos realizadas, el tiempo de trabajo empleado, entre otras cuestiones. Solo recurriendo a estas métricas una empresa puede mejorar la calidad de su servicio logístico. 

En este artículo detallamos a continuación los principales indicadores en tu área logística que no puedes desaprovechar. Todos ellos están pensados para aplicarse en las 3 etapas más importantes de la cadena de suministro: proveedores, producción y expedición.

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1. Costos.

Tener costos mal medidos hace los procesos ineficientes en lo inmediato, ya sean combustibles, horas hombre, máquinas o cualquier tipo de recurso necesario para completar el proceso logístico. Tanto para la logística de terceros, llámese MercadoLibre, como la logística interna gestionada por la misma empresa estas métricas podrán dar cuenta del gasto excesivo o el ahorro que involucran los procesos logísticos actuales. Existen distintos tipos de costos medibles en el área logística.

1.2. Costos de la hora.

El costo de la hora también se aplica a  la producción, depósito y expedición. Se ocupa de revelar cuánto cuesta que un operario produzca y las tareas incluidas dentro de esa producción individual, como por ejemplo la carga y poner en movimiento un camión.

Hoy en día, la logística apunta a tercerizar, es decir, subcontratar los servicios logísticos de otra empresa para realizar los repartos y distribución de productos. Esto permite reducir costos, pero sin métricas que controlen la actividad percibir el ahorro no será posible. Saber quién es tu colaborador, cómo está trabajando y con quién es fundamental para garantizar una inversión rentable a largo plazo en un servicio logístico tercerizado. 

1.3. Costos del transporte.

Los costos promedio de transporte calculan un total de los gastos involucrados en el procesamiento de un pedido desde el principio hasta el final. Puedes desglosar todos los costos relacionados con este KPI de logística según distintas categorías: el procesamiento de pedidos, el administrativo, el inventario, el almacenamiento y, finalmente, los costos reales de transporte. 

Después de calcular todo esto, puedes evaluar el porcentaje que representa cada etapa del proceso y ver si eso es excesivo o está dentro de las normas. También puede calcular los costos de transporte en relación con un producto y fijarte cuánto cuesta un artículo en comparación con la cantidad de ingresos que te genera.

1.4. Costos de almacenamiento.

El almacenamiento es la gestión del espacio y el tiempo. Los costos de almacenamiento se refieren al dinero asignado a los bienes que se mueven dentro o fuera del almacén. Estos gastos cubren los costos de equipo y energía, como ordenar, almacenar y cargar los productos, así como costos más humanos, como mano de obra, envío o entrega. 

Medir los costos de almacenamiento y los costos totales de transporte no es una tarea fácil, pero una vez hecho, facilitará tu gestión general agregando mucho valor, algo que la alta dirección o los inversores agradecerán.

1.5. Costos de recogida y empaque.

Esta métrica tiene como objetivo medir todos los aspectos de costos relacionados con la recolección y el empaque de tus pedidos. Por ejemplo, la mano de obra, los materiales de embalaje o el equipo. El objetivo final aquí debe ser mantener siempre los costos lo más bajos posible. Por lo tanto, monitorear este indicador será útil para comprender si estás gastando más recursos de los necesarios en todo el proceso. 

2. Eficiencia.

Este indicador hace referencia a la eficiencia de los colaboradores en la cadena de suministro, que abarca desde los proveedores que entregan la materia prima, cuánto demora en ser procesada y cuánto demora en ser entregada, el personal interno de la compañía, hasta los servicios logísticos tercerizados. Entonces, este indicador mide el rendimiento a través de 3 niveles:

• Proveedores.
• Eficiencia interna.
• De terceros.

En sí, el servicio logístico te brinda un gran poder sobre los proveedores. Sin planificación en una época de aumento de la demanda, ya sea vendiendo más o entregando más, va a llegar un momento en que será tan grande el volumen del pedido que necesitarás contratar un servicio logístico externo. 

Entonces, el primer paso es medir internamente para saber qué nivel de eficiencia posee cada colaborador dentro de la empresa, y a partir de allí considerar un servicio tercerizado que deberá ser medido también. 

3. Capacidad de producción. 

La capacidad de producción es la máxima obtención de bienes y servicios que pueden alcanzarse por unidad productiva, a través de una serie de recursos disponibles, durante un periodo de tiempo determinado. Si una unidad productiva está produciendo por debajo de su capacidad de producción, el rendimiento de esta unidad es deficiente y requiere la implementación de una mejora del proceso,porque de lo contrario los altos costos causarán pérdidas financieras desafortunadas.

Para lograr un incremento de la capacidad de producción de una fábrica, debes invertir en una nueva máquina que produzca más. Pero además, ten en cuenta que la capacidad de producción se mide según el uso de los recursos disponibles de forma eficiente, así como la incorporación de medios productivos funcionando en condiciones óptimas.

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4. Tiempo.

El medidor de tiempo implica establecer cuánto se requiere producir en un determinado plazo. Dentro de esta variable, existen diversas categorías según el proceso logístico que deba medirse. 

4.1. Tiempo de envío.

El rendimiento del envío a tiempo se refiere a la proporción de pedidos que se enviaron en la fecha de envío solicitada o antes, dividida por el número total de pedidos. De hecho, si la cantidad de tiempo entre el momento en que el cliente realiza su pedido y el momento en que se prepara para enviarlo es demasiado largo, eso puede mostrar algunos problemas en el proceso que deben solucionarse. 

Ya sea que se trate de procesos de planificación obsoletos o sistemas de ejecución desconectados que sean demasiado lentos para enfrentar una demanda creciente, los problemas deben abordarse para responder rápidamente a los eventos inesperados.

4.2. Tiempo de entrega.

El tiempo medio de entrega se mide desde el momento en que se realiza el pedido para su envío y el momento en que se entrega al cliente/oficina de correos. Después de comparar y tener una idea del tiempo de entrega promedio desde el almacén a cualquier lugar, el objetivo sería disminuirlo cuando sea posible, ofreciendo servicios de entrega especiales, por ejemplo, priorizando lo que es más importante. 

Decir que un pedido llegará en 4 a 5 días hábiles es mejor que decir que llegará en 1 a 5 días hábiles. Además, si puedes precisar el horario de entrega (entre las 13h y las 15h en lugar de entre las 8h y las 18h), es aún mejor. De esa manera, tu cliente sabe cuándo debe estar en casa para recibir el paquete, lo que aumenta la tasa de precisión en la recolección de pedidos y evita devoluciones.

5. Capacidad de almacenamiento.

Este indicador permite medir el volumen de materias primas, productos intermedios y productos terminados que se alojan en el depósito, y cómo ordenarlos de tal modo que no se exceda el stock por una capacidad de producción más eficiente de lo normal y disminución de las entregas, ni que permanezca vacío por un aumento de las entregas y una baja capacidad de producción. 

6. Punto de reordenamiento.

Se trata de conocer un parámetro sobre en qué momento pedir en cualquier instancia de la cadena de suministro. En qué momento se debe pedir a producción que fabrique más y en qué momento se debe pedir al proveedor que envíe más materia prima.

7. Lead time. 

Se le llama lead time o tiempo del ciclo de entrega al tiempo que transcurre desde que se genera una orden de pedido a un proveedor hasta que la mercadería es entregada de ese proveedor al cliente, ya sea particular o una tienda. Según el tramo de la cadena de suministro que quieras medir, el lead time puede variar en sus resultados. 

Por ejemplo, podemos hablar de un lead time de ventas, que permitirá establecer una fecha de entrega con los clientes. O bien, considerar un lead time de compras, en donde vas a negociar con los proveedores la mejor forma de que las materias primas lleguen en tiempo y forma y no se produzca desabastecimiento en la línea de producción.

El lead time de producción, en cambio, permitirá calcular los tiempos de fabricación, a fin de estimar el impacto en la gestión logística y comercial. Asimismo, un lead time en logística y distribución requerirá una visión integral de los tiempos del resto de las áreas y procesos, para determinar cuánto va a tardar la producción en fabricar los productos, cuándo llegarán al depósito y en cuánto tiempo llegarán a manos del cliente.

El lead time se calcula midiendo la diferencia entre la fecha de entrega y la fecha de pedido. El resultado revela la cantidad de días que pasaron desde que se realizó el pedido hasta que llega al cliente. Este indicador se mide con mayor exactitud a partir del histórico de los pedidos y entregas para evitar la incertidumbre durante el proceso.

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En conclusión, los principales indicadores en logística que pueden ayudarte a medir el rendimiento y los resultados de los procesos logísticos son las métricas sobre el tiempo, los costos, la eficiencia, la capacidad de producción y almacenamiento, punto de reordenamiento y lead time. Cada uno de ellos se aplica sobre la base de los 3 niveles de la cadena de suministro: proveedores, producción y expedición o envío, a fin de identificar problemas u oportunidades de mejora.