Caso Oatly: Alternativa láctea basada en avena

La lactosa, presente en los productos lácteos, genera muchas veces intolerancia en un porcentaje alto de la población, por lo que estos grupos agradecen las alternativas igualmente nutritivas que las empresas alimenticias elaboran para sustituir a los lácteos. Uno de esos sustitutos es la avena, alimento que la empresa sueca Oatly ha procesado en sus plantas de producción para ofrecer un nuevo producto saludable a las personas. 

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Oatly se especializa principalmente en producir alimentos a base de avena, como alternativa vegana a la leche de vaca, por tratarse de una opción deslactosada para personas alérgicas a la leche animal. Por esta iniciativa sostenible enfocada en productos basados en plantas y su compromiso con el medio ambiente, la compañía ha ganado reconocimiento y popularidad. Activa desde la década del 90, Oatly ha desarrollado sus productos sobre la base de investigaciones de la Universidad de Lund, en Suecia.

Los mercados clave de Oatly son principalmente Suecia, Alemania y el Reino Unido. Sus productos están disponibles en 60.000 tiendas minoristas y 32.200 cafeterías en todo el mundo. A partir de 2020, la empresa comenzó a estar disponible también en 11.000 tiendas de café y té en China, y en más de 6.000 tiendas minoristas y especializadas en Estados Unidos, incluidas miles de ubicaciones de Starbucks. En este nuevo caso de estudio, te contamos cómo nace Oatly, su modelo de negocio y qué estrategia publicitaria está implementando actualmente. Descubre el caso Oatly.

Historia de Oatly: Sustituir lácteos por alimentos a base de avena

La historia de Oatly se remonta a la década de los 90, cuando el profesor Richard Oste, un científico e investigador sueco, en un trabajo conjunto con su hermano Bjorn, desarrolló un método para transformar los granos de avena en productos sustitutos de los lácteos. En la pequeña ciudad de Landskrona, fundaron la compañía, orientada a defender una visión sostenible y respetuosa con el medio ambiente, frente a los productos lácteos tradicionales. 

La elección de la avena, como ingrediente principal de elaboración de estos productos, obedece a la disponibilidad local y al menor impacto ambiental comparado con los productos lácteos. En un principio, Oatly lanzó su producto insignia: la leche de avena. Este alimento innovador cobró popularidad rápidamente, en especial entre aquellos que buscaban alternativas lácteas no solo por cuestiones de salud sino también por consideraciones éticas y medioambientales. 

A medida que crecía la demanda de productos elaborados con avena, Oatly expandió su línea de productos para incluir yogures, helados y otros productos lácteos tradicionales fabricados con avena. Su expansión no se limitó a Suecia, ya que la marca empezó a obtener reconocimiento internacional. En 2012, la compañía experimentó un cambio significativo cuando la firma de capital privado Verlinvest y otros inversores adquirieron una participación mayoritaria en Oatly. Esta alianza permitió a Oatly expandirse aún más y cimentar su presencia global.

En la década de 2020, Oatly alcanzó una importante popularidad, especialmente en mercados como Estados Unidos y el Reino Unido. De esta forma, la marca se asoció con cafeterías y cadenas de comida para ofrecer opciones a base de avena, como lattes y batidos. Asimismo, en 2021, Oatly llevó adelante una oferta pública inicial (OPI) en la Bolsa de Valores de Nasdaq, lo que marcó otro hito en su trayectoria.

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Modelo de negocio de Oatly: Productos sostenibles libres de lactosa

En relación con su modelo de negocio, Oatly genera ingresos principalmente a través de la venta de sus productos, que incluyen una variedad de bebidas de avena, como leches y cremas, así como productos derivados como helados y yogures. Además de la venta de productos en tiendas minoristas, Oatly también ha participado en acuerdos con cafeterías y restaurantes para ofrecer sus alternativas lácteas en sus menús. 

Por otra parte, la marca ha logrado reconocimiento por su marketing distintivo y enfoque en la sostenibilidad, atrayendo a consumidores que buscan alternativas de alimentos y bebidas más saludables y respetuosas con el medio ambiente. Todos los productos de Oatly están certificados como kosher y veganos, y verificados por proyectos sin OGM. Además, en Estados Unidos están certificados libres de gluten, aunque en Europa y Asia esta norma no se cumple.

Publicidad fuera de las reglas

Recientemente, Oatly llegó a Francia y no se le ocurrió mejor manera de dar que hablar que rebelarse contra las normas del país, que prohíben la publicidad exterior en paredes, ya que, según esta norma, solo se permiten murales artísticos, pero nada que tenga que ver con logos o imágenes de marca. Sin embargo, la empresa decidió romper las reglas y crear una campaña que llamara la atención de los ciudadanos. Para esto, Oatly ha pintado frases en la ciudad de París, pero sin logo ni imagen de marca.

Los murales fueron escritos con la tipografía propia de Oatly, por lo que aunque no incluyeran el logo y la imagen de marca, las frases que aludían a la necesidad de tomar una bebida de avena y la tipografía más que reconocible hablaban por sí solas. Pero la empresa no se conformó con eso y quiso ir un poco más allá incluyendo a varios de sus repartidores de productos de avena para que posaran junto a los murales con frases y la gente que viera estas capturas fotográficas pudieran reconocer fácilmente la marca.

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En palabras finales, el caso Oatly es una demostración palpable que busca reconciliarse con el medio ambiente a través de su modelo de negocio sostenible, orientado a la elaboración de productos veganos a base de avena, lo que permite que las personas intolerantes a la lactosa tengan una alternativa igual de nutritiva y saludable para mantener un bienestar integral. 

Destaca también la importancia de reducir la huella de carbono y abogar por una dieta basada en plantas. Su impacto en la industria alimentaria ha sido significativo, inspirando a otras empresas a explorar opciones a base de plantas y fomentando la conciencia sobre la importancia de adoptar prácticas alimentarias más sostenibles.