Caso Fitbit: Inteligencia artificial en entrenamiento

Son numerosas las empresas que han incursionado en el mercado tecnológico en las últimas dos décadas. Una de ellas que se destaca en la fabricación de productos electrónicos es Fitbit, una marca de dispositivos digitales diseñados para el seguimiento y monitoreo de la actividad física, la salud y el bienestar. Los productos que comercializa Fitbit incluye smartwatches, pulseras de actividad y otros dispositivos portátiles que recopilan información sobre el ejercicio, el sueño, la frecuencia cardíaca y demás aspectos relacionados con el cuidado de la salud.

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Estos dispositivos utilizan sensores como acelerómetros y monitores de ritmo cardíaco para recolectar datos sobre la actividad diaria de las personas y brindarles estadísticas detalladas y análisis de su rendimiento físico. Además, Fitbit ofrece servicios online y aplicaciones móviles que permiten a los usuarios realizar un seguimiento pormenorizado de su progreso a través del tiempo, trazar metas para mejorar la calidad de vida y participar en desafíos con amigos.

El primer producto que comercializa la marca es el Fitbit Tracker, que es un seguidor de actividad. A lo largo de los años, ha obtenido numerosos reconocimientos, entre los que se cuentan convertirse en finalista en el Tech Crunch 50 de 2008, recibir un homenaje por la innovación y ganar en la categoría de Salud y Bienestar del Consumer Electronics Shows, de 2009. En este nuevo caso de estudio, te contamos la historia de Fitbit, su modelo de negocio y su incursión reciente en el uso de la inteligencia artificial. Descubre el caso Fitbit.

Historia de Fitbit: Seguimiento de la actividad física

La historia de Fitbit se remonta a 2007, cuando James Park y Eric Friedman fundaron una empresa cuya visión de negocio era crear dispositivos que permitieran a las personas llevar un estilo de vida más saludable y activo. La idea original surge de la premisa de que el monitoreo personalizado y continuo de la actividad física podría generar un impacto positivo en la salud integral de las personas.

El primer producto lanzado por Fitbit fue en 2009 y se llamó simplemente "Fitbit". Se trataba de una pequeña pulsera que los usuarios podían llevar durante todo el día para realizar un seguimiento de su actividad física, como pasos dados, distancia recorrida, calorías quemadas y calidad del sueño. La pulsera era sincronizada de forma inalámbrica a través de una plataforma online, donde los usuarios podían ver sus datos y definir metas personales.

Con el paso de los años, Fitbit continuó creciendo y lanzando nuevos productos para satisfacer las necesidades y demandas presentes en el mercado de la tecnología digital. Fue así que implementaron modelos más avanzados con inteligencia artificial que incluían funciones como monitores de ritmo cardíaco, GPS incorporado y seguimiento de la salud femenina. Además de pulseras de actividad, Fitbit expandió su línea de productos para introducir smartwatches, como la serie Fitbit Versa.

En 2015, Fitbit se convirtió en una empresa pública al cotizar en la Bolsa de Nueva York. Desde sus inicios hasta la actualidad , la marca se ha vinculado con numerosas organizaciones y ha realizado adquisiciones estratégicas para mejorar su desarrollo tecnológico y expandir sus alcances en el terreno de la salud y el bienestar.

En 2020, Google anunció su intención de adquirir Fitbit, una jugada que suscitó ciertas especulaciones acerca de la privacidad de los datos de los usuarios. Tras la negociación, la adquisición se completó en enero de 2021, y Fitbit se unió oficialmente a Google. En noviembre de 2023, Google anunció que Fitbit abandona el mercado latinoamericano, abarcando países como México, Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico y Venezuela.

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Modelo de negocio de Fitbit

Antes de su adquisición por Google, el modelo de negocio de Fitbit se basaba en la venta de hardware, particularmente dispositivos de seguimiento de la actividad física y salud, que incluían pulseras de actividad y relojes inteligentes. Estos dispositivos ofrecen una variedad de funciones, desde el seguimiento de pasos y la monitorización del ritmo cardíaco hasta el seguimiento del sueño y otras métricas relacionadas con la salud. 

Fitbit también generaba ingresos adicionales a través de la venta de accesorios para sus propios dispositivos, como correas intercambiables y cargadores. Proporcionaban servicios premium a través de suscripciones, que brindaban características adicionales, análisis más detallados y programas de entrenamiento personalizado. Además, proveía una plataforma online y aplicaciones móviles donde los usuarios podían sincronizar y analizar sus datos recolectados por los distintos dispositivos.

Mediante esta plataforma, los usuarios podían definir metas, realizar un seguimiento de su progreso a lo largo del tiempo y participar en desafíos y competiciones con otros usuarios. Asimismo, Fitbit estableció colaboraciones y alianzas estratégicas con una gran diversidad de empresas, como programas de bienestar corporativo, para ampliar su alcance y captar nuevos usuarios. Cabe señalar que, tras la adquisición por parte de Google, Fitbit podría haber experimentado cambios en su modelo de negocio, ya que podría haberse integrado más estrechamente con los servicios y ecosistemas de Google. 

Si bien esta jugada de Google pone a la empresa bajo su poder, lo cierto es que debe entenderse más como una alianza estratégica, que le permite a Fitbit ampliar su horizonte a través de la infraestructura que le puede proporcionar el gigante tecnológico para desarrollar muchas y mejores aplicaciones de seguimiento de la actividad física, que implementan directamente la IA más avanzada.

Sin embargo, la retirada de productos de 30 países del mundo, incluidos México y casi toda Latinoamérica, donde sus productos se comercializaban bastante bien, preocupa sobre el futuro de la marca dentro de los planes de Google. Hasta el momento, no hay mucha información al respecto sobre este inesperado abandono de un mercado tan amplio y la permanencia solo en 23 países, pero probablemente Google esté preparando un relanzamiento de la marca con su propia tecnología. Tendremos que esperar para tener más novedades.

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En palabras finales, el caso Fitbit se destaca principalmente por promover un estilo de vida saludable para las personas, a través de la creación de dispositivos de seguimiento de la actividad física, entre los cuales la pulsera de actividad y los smartwatches son los aparatos que más adhesión tuvieron y siguen teniendo entre las personas que eligen vivir una vida más sana y controlada. Hasta la adquisición de Google, Fitbit ha desempeñado un papel importante en la popularización de los dispositivos de seguimiento de la actividad física y ha contribuido a la creciente conciencia sobre la importancia de mantener un estilo de vida activo y saludable.