La industria textil es un sector que se dedica a la producción de fibras naturales y sintéticas, hilados, telas y todo lo relacionado con la confección de ropa. En este sentido, los materiales textiles son productos de consumo masivo, razón por la cual la industria textil y la confección generan gran cantidad de oportunidades de trabajo.
Las fábricas textiles son los lugares donde se desarrolla el trabajo y la elaboración de los distintos materiales. Además, contienen instalaciones fabriles especialmente diseñadas y acondicionadas para la confección de las prendas.
Las empresas textiles importantes tienen una gran cantidad de producción en masa de marcas para distribuirla a distintos comercios que la comercializan directamente a los consumidores. Sin embargo, no están exentas de sufrir demoras, faltantes o excedentes de existencias, que amerita hacer ajustes decisivos para ordenar el proceso de producción en la empresa textil.
Como es una industria en constante crecimiento y que, pese a la transformación digital, se ha ido adaptando a los cambios estructurales a lo largo del tiempo, pudo incorporar más tecnología para automatizar los procesos de producción textil, permitiendo a los colaboradores encargados de la confección un poco de respiro, a fin de que puedan dedicarse a tareas de mayor valor, como supervisar la producción y calidad del producto.
¿Cómo ordenar el proceso de producción en tu empresa textil?
Si tu empresa se dedica a la industria textil, es posible que necesites una guía para ordenar el proceso de producción en tu empresa textil, puesto que un proceso productivo óptimo va a poder ofrecer productos textiles de calidad utilizando materias primas también de calidad, respetando ciertos plazos de fabricación, para satisfacer las necesidades y demandas de sus clientes.
Cuando ocurre una desviación en el proceso productivo, existen muchas posibilidades de que se tenga que sacrificar algún elemento de la cadena productiva, como por ejemplo, reducir los costos de la materia prima, en este caso, trayendo telas y fibras de menor calidad para generar un lote más extenso.
También puede suceder que, en lugar de adquirir materias primas de menor calidad no se preste la debida atención a los procesos de fabricación, en el afán de cumplir los plazos de entrega de la mercancía textil convertida en indumentaria, y el producto final no atraviese los rigurosos controles de calidad, un paso indispensable para lanzar cualquier producto al mercado.
A continuación, te ofrecemos la puesta en práctica de estos 5 pasos para ordenar el proceso productivo en tu empresa textil, con el fin de que aumentes la eficiencia y eficacia de cada etapa del proceso y la mejora continua en la productividad se traduzca en resultados más rentables y en clientes más satisfechos.
-
Trazar un mapa de procesos de la planta productiva textil.
Elaborar un mapa de procesos te ayudará a conocer en profundidad el funcionamiento de los procesos y actividades en los que el área de producción, en este caso, está involucrada y cómo se interrelacionan. También podrás detectar posibles fallas en el funcionamiento, tanto de maquinarias como de las habilidades humanas para emplearlas o ejecutar diversas tareas con eficiencia.
Por ejemplo, un mapeo de procesos en tu empresa textil te permitirá calcular los ingresos y egresos de las materias primas y producción en masa, al igual que de los costos y ganancias que circulan en determinado periodo de tiempo, mensual, trimestral, anual, etc. Ten en cuenta que la fabricación o confección de prendas requiere no solo buenas fibras e hilos, sino de una habilidad casi artística para las terminaciones.
-
Identificar posibles obstáculos o desviaciones en el resultado del proceso productivo.
El mismo mapa de procesos te ofrecerá las herramientas clave para identificar las fallas en el proceso productivo, como por ejemplo, una máquina de coser industrial obsoleta que retrasa el proceso de confección en masa, haciendo que, en consecuencia, no se cumplan con los plazos estipulados de entrega y distribución.
Si la falla era la máquina de coser antigua, ya sabes que tienes que reemplazarla, así sean más de una o todas. Invertir en infraestructura y maquinaria de fabricación nunca es un gasto cuando prevé un bien mayor, haciendo a tu empresa más competitiva en el mercado de la industria textil. Además, reducirás el estrés en tus colaboradores al trabajar en mejores condiciones.
-
Elaborar soluciones o nuevos objetivos específicos para solucionar esas desviaciones.
Lo anticipamos en el ejemplo anterior de las máquinas de coser obsoletas. Si tu empresa lleva muchos años o incluso décadas confeccionando telas y prendas textiles con las mismas máquinas industriales de hace más de 50 años, es momento de un cambio urgente, ya que lo que era productivo y rentable en su tiempo, cuando el mercado y las necesidades humanas eran otras, hoy ya no lo es.
Imagina que tus colaboradores sigan empleando máquinas a pedal y que tengan que apurar la producción en serie para satisfacer la enorme demanda de clientes. Sería una terrible pérdida económica para tu empresa en ventas y gastos de personal, sin contar el agotamiento físico general, cuando podrías haber automatizado tu proceso de producción.
Comprando máquinas de coser de última generación, ningún trabajador tendrá que esforzarse más de lo debido para ejecutar el proceso de confección de prendas. Y te ahorrarás mucho dinero en tareas manuales y repetitivas que podían ser automatizadas.
-
Capacitar al personal involucrado en las nuevas disposiciones de mejora y ordenamiento del proceso productivo.
Otro de los pasos importantes para ordenar el proceso de producción en tu empresa textil es capacitar al personal sobre el uso de las nuevas tecnologías incorporadas.
Siguiendo con el ejemplo anterior, si te has dado cuenta de que necesitas una mejora definitiva en tu proceso de confección de prendas y no se trata de la calidad de la materia prima sino de la obsolescencia de tus máquinas industriales, no dudes y ve por máquinas modernas. Una vez que las tienes, tu próximo desafío será enseñar a tus colaboradores a utilizarlas adecuadamente y supervisar las tareas para verificar lo aprendido.
-
Seguimiento y control de las actividades de mejora, estableciendo métricas de desempeño y optimización del proceso productivo textil.
Ahora que ya has implementado las mejoras para ordenar tu proceso de producción en tu empresa textil, es hora de comprobar los resultados en números. Puedes implementar tableros de control para cuantificar esas métricas y llevar un balance periódico de las mismas.
En el caso de nuestro ejemplo, una vez que ya incorporaste máquinas modernas en reemplazo de las viejas, dejaste de subcontratar obreros para acelerar la producción en masa en los periodos de más demanda y capacitaste a tu personal permanente en el manejo de las nuevas máquinas, solo resta medir las mejoras implementadas.
Por consiguiente, las máquinas modernas junto a la capacitación del personal deberían darte como resultado la recuperación total de la inversión que hiciste y un importante margen de rentabilidad, además de una mayor productividad integral en el proceso de producción textil.
Bonus: siempre que puedas, automatiza las tareas repetitivas implementando tecnologías en tu empresa textil.
Mientras que hace 200 años atrás, los trabajadores textiles debían enhebrar lana suelta en el huso y girar la rueda de hilado con la velocidad y tensión adecuadas, hoy en día, por ejemplo, se utilizan máquinas automáticas neumáticas. El aire comprimido se usa para el giro por aire, también conocido como giro por chorro de aire.
El proceso de giro genera una cobertura de fibras retorcidas que rodean al núcleo de fibra firmemente. Así, el hilo es muy estable, con una superficie pareja. La tecnología de automatización también apoya a los trabajadores textiles en la apertura de ojales.
Pueden ajustar la forma y largo a través de un panel de control de la máquina, eliminando así la necesidad de un largo proceso de medición. Después de eso, los operarios solo deben guiar la máquina, y esta cose la forma en la prenda y luego recorta: el ojal está listo.
La gran mayoría de la industria textil está ubicada en Asia, sobre todo en los países tropicales. Dado que allí el clima es cálido y húmedo y el ambiente a menudo es polvoriento, se requieren componentes robustos para las máquinas.
Los componentes neumáticos en particular son de larga duración y pueden soportar condiciones ambientales tales como fluctuaciones de humedad y temperatura. Para evitar que se suelte la costura o salgan ojales torcidos cuando se trabaja sobre una prenda, la precisión también es muy importante.
Los componentes neumáticos satisfacen ese requisito: las máquinas con esa tecnología reúnen gran intensidad de energía, lo que las hace ganar tanto en rapidez como en precisión.
Conclusión:
Puesto que no es tarea fácil trabajar en la industria textil debido a la cantidad de tareas, actividades, procesos y subprocesos, con estos 5 pasos interrelacionados ordenar el proceso de producción en tu empresa textil dejará de ser un quebradero de cabeza para ti y los resultados de la mejora hablarán por sí solos de aquí a un tiempo.
¿Nos dejas un comentario?