La industria metalmecánica ha estado automatizando los procesos de fabricación durante décadas, y se podría argumentar que la automatización es el componente clave que hace que los países industrializados logren ser productivos.
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Además, la adopción de procesos de fabricación automatizados puede crear un ciclo virtuoso en el que una mayor rentabilidad genera ingresos para inversiones de capital adicionales. Algunos fabricantes pueden tener razones legítimas para apegarse a procesos manuales comprobados, pero muchos evitan la automatización por razones que no son necesariamente válidas, como:
- El equipo automatizado es demasiado complicado.
- No estamos familiarizados con eso.
- Es muy caro.
- No sabremos cómo ejecutarlo.
- Capacitar a las personas para que lo ejecuten llevará demasiado tiempo.
- Tendremos dificultades para cambiar de una parte a otra.
Los primeros obstáculos
El temor a que los sistemas automatizados sean demasiado complicados y difíciles de dominar es la raíz de la mayoría de estas preocupaciones. Pero debe entenderse que automatizado no significa complicado.
Después de mojarse los pies con un proyecto simple, un fabricante puede pasar a aplicaciones más sofisticadas.
"Si un fabricante comienza con un proyecto simple, como la automatización de la caída de piezas en una bolsa para un enfoque transportador, el personal puede aprovechar lo que aprendió y aplicarlo en otro lugar", dijo Mike Bollheimer, gerente de producto para doblado y fabricación de tubos, hidroformado y automatización de marcos estructurales en Wayne Trail Technologies, Fort Loramie, Ohio, un fabricante e integrador de equipos. "Muy pronto están buscando oportunidades para automatizar en todas partes", dijo Bollheimer.
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Después de que la pelota rueda, las tareas complicadas comienzan a parecer manejables. A veces, un proceso que suena simple, como levantar y apilar láminas de aluminio revestidas finas, puede ser un desafío difícil.
Ya sea que un proceso sea simple o complejo, otro obstáculo potencial para adoptar la automatización es comprender cómo el nuevo sistema encaje con los procesos existentes de la empresa. Si la compañía fabrica muchas partes diferentes y utiliza una multitud de procesos, puede ser difícil interrumpir el sistema existente para probar algo nuevo. Aquí es donde un taller de fabricación tiene una ventaja sobre otros fabricantes más grandes.
Planificar
Para los fabricantes que piensan en automatizar un proceso de fabricación, es una buena idea pensar como un desarrollador de sistemas automatizados o un integrador de equipos.
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Los fabricantes de metales rara vez tienen que lidiar con algo tan sofisticado como medir la química de un líquido, pero el concepto de entrada-lógica-salida es fundamental para comprender cómo funciona un sistema automatizado en un entorno de fabricación. La entrada suele ser la mayor limitación para automatizar procesos.
Cómo empezar
Incluso si el sistema es simple, la mayoría de los fabricantes necesitan un poco de ayuda para comenzar, especialmente en su primer proyecto de automatización. Una dificultad principal puede ser visualizar cómo funciona una célula. En estos casos, los paquetes de software pueden proporcionar una simulación visual. Las herramientas de simulación muestran lo que la automatización puede hacer.
Un cambio de procesos manuales a automatizados es una oportunidad para repensar la forma en que se fabrica una pieza. Es una oportunidad para que los ingenieros del diseñador de equipos desarrollen una forma completamente nueva de fabricar el componente en cuestión, lo que puede generar grandes ganancias.
Los fabricantes también deben ser conscientes de que la adopción de maquinaria automatizada requiere un replanteamiento de los procesos y capacidades de la empresa. La automatización flexible mejora la productividad al abrir una nueva capacidad.
Por ejemplo, tal vez una empresa inicialmente siente que tiene suficiente soldadura para mantener ocupado a un robot seis horas al día y la compañía ejecuta dos turnos, este robot estará disponible por 12 horas en total. Solo se necesita un poco de planificación y estudio para descubrir cómo usar ese robot las otras 12 horas al día ".
Un proyecto automatizado es un proyecto de personas
La planificación, instalación y puesta en marcha exitosa de un proyecto de automatización tiene que ver tanto con las personas como con los equipos. John Schott, presidente de EPIC Systems Inc., citó tres componentes clave de un proyecto de automatización exitoso, y ninguno tuvo mucho que ver con el acero frío y la rutina impersonal de una máquina, pero sí mucho que ver los colaboradores de la compañía.
Primero, un campeón de automatización interno y un propietario del sistema son necesarios para garantizar el éxito del sistema instalado. Esto es crítico para la aceptación general. El equipo necesita una dirección clara de un líder sólido y comprometido.
En segundo lugar, EPIC se basa en los aportes de los operadores y el personal de mantenimiento antes de diseñar un sistema automatizado.
"Si no incluimos a las personas que serán responsables del sistema, no estamos caminando en sus zapatos", dijo Schott. “Obtener la opinión de todos les da a cada uno un interés personal en el éxito del proyecto. Si omitimos este paso, podemos diseñar el mejor sistema imaginable, pero no será un éxito ".
El tercero es la necesidad de que el cliente cuente con personal de mantenimiento capacitado para mantener y solucionar problemas del sistema.
"Brindamos capacitación para operadores y personal de mantenimiento, pero es importante contar con técnicos de mantenimiento dedicados en su planta que puedan reparar el equipo", dijo Schott. "Podemos enviar a uno de nuestros representantes de servicio si es necesario, pero tiene más sentido tener a alguien en tu personal que pueda solucionar problemas fundamentales y mejorar el sistema".
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