Desarrollo de modelos financieros: Herramientas y mejores prácticas

Los modelos financieros tienen como objetivo reducir el nivel de incertidumbre y anticipar los posibles escenarios futuros, a fin de mitigar el impacto de los riesgos asociados al estado de las finanzas de una empresa. Elaborar un modelo financiero representa una acción clave y necesaria para evaluar la factibilidad y viabilidad de las inversiones o negocios que implica la gestión financiera de una organización. Si está bien hecho, el modelo financiero te ayuda a entender y predecir el comportamiento de todos los parámetros financieros a través de diversas métricas.

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Asimismo, permite crear pronósticos para tomar mejores decisiones que contribuyan a aumentar la rentabilidad de las unidades de negocio de tu empresa, asumir o no riesgos y considerar todas las posibles consecuencias en determinados escenarios donde la economía tiene un alto nivel de incertidumbre. Existen softwares de modelos financieros que te permiten cargar ciertos valores, indicadores y rangos sobre los cuales se va a generar la previsión mediante una automatización de este proceso.

Un modelo financiero se puede materializar tanto en un Excel como en un sistema automatizado, pero lo realmente importante son los datos que se recolectan para estos modelos. Estos datos que se cargan tienen que ser precisos, correctos y deben estar lo más actualizados posible. En este artículo, te ofrecemos una guía detallada sobre cómo construir modelos financieros efectivos para analizar con mejores herramientas el rendimiento financiero futuro de tu empresa. 

¿Cómo construir modelos financieros exitosos?

Los modelos financieros son herramientas esenciales para la toma de decisiones de tu empresa, ya que tienen la capacidad predictiva de anticiparse a ciertos acontecimientos antes de que se manifiesten. Desarrollar un modelo financiero te permite analizar presupuestos, establecer proyecciones detalladas y realizar comparaciones mes a mes para conocer el estado actual de tu empresa. Así como las empresas necesitan tener una visión definida de su negocio, los inversores necesitan saber en qué invierten.

A continuación, enumeramos las mejores prácticas para confeccionar un modelo financiero.

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1. Trazar objetivos comerciales.

Incluso en la construcción de un modelo financiero es necesario definir objetivos comerciales que sean específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales (SMART). Esto te permitirá analizar el desempeño de cada acción realizada y el esfuerzo que se está invirtiendo para llevarlas a cabo. En los objetivos deberás incluir información vinculada con las posibles acciones que ayudarán a hacer crecer tu negocio, de qué forma puedes medir ese crecimiento, si cuentas con los recursos necesarios y el tiempo que has estipulado para alcanzarlos.

2. Incluir impulsores comerciales.

Otra de las prácticas clave para construir modelos financieros es definir los impulsores comerciales para obtener un panorama general de todas las acciones y esfuerzos orientados al logro de los objetivos comerciales. Aquí puedes definir un impulsor comercial por cada objetivo, es decir, una meta concreta que ayude a cumplir una meta u objetivo más grande. Al crear un modelo financiero con impulsores puedes tomar decisiones más informadas. Por ejemplo, invertir en marketing para atraer nuevos clientes potenciales.

3. Plantear diversos escenarios.

Una de las prácticas más importantes para definir un modelo financiero es analizar distintos escenarios en que podría encontrarse tu empresa en el futuro y abordar posibles soluciones o acciones para cada uno de los escenarios. Al menos, debes considerar 3 escenarios: un escenario optimista, en donde las acciones conduzcan al logro de tus objetivos, e incluso los resultados superen tus expectativas, de negocios y la ejecución se desarrolle dentro de los plazos establecidos. 

Un segundo escenario más realista, en donde se contemplen ciertos riesgos y problemas aunque logrando, al final del día, los resultados esperados. Y un tercer escenario pesimista debería analizar lo que sucedería en un futuro, si los riesgos potenciales se transforman en problemas reales. Plantear estos 3 escenarios te permitirá abordar las problemáticas desde distintas perspectivas para luego definir posibles soluciones, acciones preventivas o correctivas que involucren al plano financiero.

4. Actualizar y repetir el proceso a intervalos regulares. 

Generalmente, las empresas exitosas realizan una evaluación periódica al menos cada 3 meses. Los modelos financieros deben analizar si las proyecciones y pronósticos se cumplen, como así también descubrir aspectos que quizá no hayan sido identificados previamente y que pueden igualmente impactar de algún modo en el desarrollo de tu empresa. De esta manera, te aseguras un control más estricto de tus finanzas en el corto, mediano y largo plazo, lo que reducirá el margen de error y los riesgos potenciales. 

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En definitiva, los modelos financieros son especialmente útiles para predecir posibles riesgos y situaciones adversas a nivel financiero y mejorar la toma de decisiones con respecto al futuro de tu organización, en términos comerciales y de objetivos alcanzados. Un modelo financiero bien construido es una herramienta muy efectiva para trazar un camino seguro sobre el cual mantener la visión de tu empresa y mitigar la incertidumbre, ya que a través de objetivos definidos, impulsores comerciales, escenarios potenciales y actualizaciones periódicas podrás garantizar la salud y estabilidad financiera de tu empresa.