Sensores de control para la línea de producción, 7 beneficios

Los sensores de control para la línea de producción son dispositivos que permiten recopilar datos de forma masiva. La información que recolectan ayudan a que las máquinas se comporten de manera inteligente. Para obtener esta información es fundamental filtrar y procesar los datos recopilados por los sensores.

Los sensores de control aportan a las máquinas la capacidad de ver, detectar y comunicar de forma más inteligente la información decodificada. Además de controlar las máquinas y procesos, la información que suministran los sensores de control para la línea de producción permite supervisar y evitar posibles fallos.

Aportan veracidad a los flujos de información, optimizando los procesos resultantes de la recolección de datos.

Los sensores de control para la línea de producción constituyen una parte muy importante de la automatización y digitalización de las fábricas. En definitiva, permiten:

• Examinar cómo funcionan las máquinas en tiempo real.
• Localizar fallos en la fabricación y/o funcionamiento.
• Estudiar cada proceso en pro de encontrar soluciones que permitan ahorrar tiempo y/o dinero.

La información se convierte en el valor más importante, que nos permite la correcta toma de decisiones en tiempo real. Los diferentes tipos de sensores de control para la línea de producción, nos proporcionan esa información que nos permite alcanzar la calidad deseada en nuestros productos. 

La evolución de los sensores de control a lo largo del tiempo ha permitido que podamos clasificar los tipos de sensores que existen en dos grupos bien diferenciados: sensores convencionales y sensores inteligentes. 

Los sensores convencionales simplemente aportan los datos, sin realizar ningún tipo de procesamiento de los mismos para extraer información relevante. 

Por otro lado, los sensores inteligentes son los que procesan los datos y obtienen información relevante: parámetros fuera de rango, evolución temporal de los mismos, o conectividad en red para el almacenamiento de datos.

Ahora que ya sabes cuáles son las características principales y qué funciones cumplen los sensores de control para la línea de producción, te contamos 7 beneficios prácticos que quizá no conocías.

1. Los datos censados son reales y exactos.

Uno de los mayores beneficios de los sensores de control para la línea de producción es la posibilidad de registrar y procesar datos reales y exactos. Al ser inteligentes, estos permiten detectar cualquier anomalía en los procesos para poder corregirla a tiempo. Por lo tanto, estarás trabajando sobre seguro con información relevante y verificable. 

2. Los datos son en tiempo real, y permiten tomar decisiones de manera inmediata.

Olvídate de perder tiempo esperando que tu sistema te entregue los datos que necesitas con urgencia o perder tiempo tú haciendo eternos inventarios. Con los sensores de control podrás tener la información que necesitas en el momento indicado para facilitarte la toma de decisiones, y quizá, anticiparte y prevenirte de algún problema futuro.

3. No hay personas involucradas en tareas repetitivas como conteo de piezas terminadas o producidas.

Otra de las ventajas de emplear los sensores de control para la línea de producción es que logras automatizar las tareas repetitivas, eliminando el número de encargados de las mismas, para utilizar solo talento humano que realice tareas de más valor. 

De esta forma, no sometes a tus colaboradores a contar pieza por pieza de producción cuando puede hacerlo un software más rápidamente y con datos más exactos.

4. Bajo costo de operación (comparado con una persona).

Ya mencionamos en otros artículos los beneficios económicos que reportan las herramientas de automatización de procesos, y los sensores de control para la línea de producción no son la excepción. Implementarlos te permite hacer una única inversión de implementación, y luego, pequeñas inversiones para renovar licencias, aceptar actualizaciones, etc.

En cambio, cuando tienes que controlar la línea de producción de manera manual, debes recurrir a la contratación de personal para que desempeñe ese tipo de funciones o, en el mejor de los casos, derivar esas tareas a colaboradores que se encargan de otras funciones en la planta. 

Como en los tiempos que corren, especialmente el uso de la fuerza física y las tareas manuales en el trabajo están infravaloradas, los líderes empresariales tienen por delante el gran desafío de mejorar estos procesos, utilizando la menor cantidad de recursos financieros posibles. 

Y la alternativa más coherente es contratar herramientas para automatizar los procesos manuales y repetitivos, reclutando personal dispuesto a aprender el uso de estas tecnologías, logrando que estas colaboren mejor con su trabajo.

5. Pueden realizar su tarea en lugares o situaciones que un humano no, ya sea por espacio físico o por peligrosidad de la tarea.

En tiempos de pandemia, es cuando más la tecnología puede no solo salvarnos la vida sino mantener nuestra economía en un lugar seguro, en especial, cuando ya no se requiere de la presencia física para ejecutar una tarea. 

6. Prácticamente, no necesitan de ningún  mantenimiento.

Tampoco los sensores de control para la línea de producción necesitan mantenimiento, y si lo necesitan, es mínimo y con costos reducidos. Como dijimos antes, es posible que solo admita algunas actualizaciones importantes y renovar licencias para obtener una experiencia de software más pura y eficiente.

7. La instalación es sencilla y permite diferentes modos de conexión. 

Y por último, otro de los beneficios más significativos de los sensores de control es permitir una instalación sencilla con una conectividad variada y de gran alcance (WiFi, Bluetooth, cableado tradicional, etc). Esto es fundamental para el trabajo remoto y también para la recolección de datos en tiempo real, ya que en el presente la información lo es todo.

En pocas palabras y para finalizar, los sensores de control para la línea de producción representan un beneficio en sí mismo para las empresas que deseen tener un control exacto de su producción. Es una herramienta de baja inversión, adaptable, de rápida y exacta entrega de datos y, sobre todo, muy compatible con la mejora de procesos, no solo en el área de producción sino también en el resto de los departamentos.