Rebranding en Twitter: Las implicacias del cambio a X

El mercado de las plataformas sociales hoy más que nunca es un océano rojo, porque está plagado de tiburones acechando por destruir a los competidores que buscan acaparar la atención de la audiencia y hacerse de una posición de liderazgo. Hace menos de un mes, nos enterábamos de la nueva apuesta de Meta, en su carrera por apalancar a Facebook. Este nuevo servicio denominado Threads fue creado para rivalizar directamente con Twitter, ya que el nombre en inglés hace referencia justamente a los “hilos”, y hasta ahora solo Twitter dominaba este término para referirse a las conversaciones públicas que podía surgir de los famosos tweets.

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Con Threads aún en pañales, el CEO de Twitter decidió que era momento de realizar un cambio radical a la imagen y al popular logo del pajarito para darle un nuevo impulso a la comunidad. El anuncio del rebranding en Twitter causó muchísima repercusión por el cambio de nombre y diseño que tendría: ahora Twitter pasará a llamarse simplemente “X”. No creemos que Elon Musk se haya vuelto loco, pero sí sabemos de sus decisiones polémicas que, curiosamente, generan tal impacto que esa publicidad, buena o mala, lo termina favoreciendo.

Para entender un poco más el contexto de esta decisión controvertida, en este artículo te contamos por qué para el fundador de Tesla el rebranding en Twitter es necesario, y cómo se supone que X logrará enganchar más a su público objetivo, después de tantos años con el icónico pájaro azul.

Twitter pasará a llamarse X

El nuevo logotipo de la plataforma consiste en una X en blanco y negro con una sola línea cruzada en diagonal y una línea doble hacia el otro sentido. Según Musk, la nueva imagen de la red social tendrá un estilo orientado hacia el art deco. Al respecto, la directora ejecutiva de Twitter, Linda Yacarino, sostuvo que la red social estará impulsada por inteligencia artificial con el objetivo de conectar más a la gente. 

En términos de la ejecutiva, “X es el estado futuro de la interactividad ilimitada, centrada en audio, video, mensajería, pagos/banca creando un mercado global para ideas, bienes, servicios y oportunidades”. El cambio generado en Twitter es el último que Musk representa con una X. Esto se suma al anuncio del lanzamiento de una nueva startup llamada xAI hace apenas unos meses, y a la ya conocida SpaceX.

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¿Qué es el rebranding y cómo se lo quiere implementar en X?

El rebranding es una estrategia de marketing que busca modificar de forma parcial o total el conjunto de elementos que identifican a la marca, con el fin de mejorar su posicionamiento. De esta forma, es posible recuperar el reconocimiento de marca o expandirse hacia nuevos segmentos de mercado. También puede ser implementado para cambiar la idea que los consumidores tienen de la marca a través de un cambio de imagen. En este sentido, el objetivo de Musk es reposicionar la marca con un enfoque mucho más ambicioso, de la mano de la inteligencia artificial.

Según el CEO de la consultora de branding Padre Group, Rodrigo Diez, el nombre es el aspecto más duradero de una marca y el cambio generalmente responde a 3 aspectos principales: problemas reputacionales, legales o de credibilidad; razones vinculadas a la internacionalización; y a cambios profundos en la dirección estratégica de una marca. Y agrega además que los cambios de nombre suelen indicar evolución o el final de un ciclo de vida. 

Asimismo, el nombre debe estar hermanado con la estrategia de marca y alinearse con su posicionamiento, por lo que X podría convertirse en el futuro en el principal eje de un conglomerado de distintas aplicaciones con propuestas igualmente ambiciosas y disruptivas. 

Otros especialistas en marketing aseguran que las razones de Musk para el rebranding en Twitter son puramente arbitrarias, ligadas a un gusto personal por la “X”, un caballito de batalla en otras compañías de su propiedad que ya le ha otorgado buenos resultados.

¿Tendrá éxito X entre los seguidores de Twitter?

Los especialistas de marketing y branding coinciden en sostener que la plataforma bajo la denominación X enfrentará grandes desafíos con su público objetivo para revalorizar su identidad de marca. Uno de ellos es qué implicaciones tendrá este cambio de nombre en el término “tuitear” o “tweets”, tan arraigados en el vocabulario de los usuarios de la red desde 2014. ¿Seguirá vigente o se redefinirá también este concepto?

Según Rodrigo Diez, los usuarios deben comprender la transformación de la marca en X, a fin de que puedan apoyar la nueva dirección estratégica. El hecho de que Twitter ya sea una plataforma muy posicionada puede ayudar a que la transición, pese a lo radical del cambio, no sea tan abrupta tanto para los usuarios como para el mercado financiero en general. 

En una encuesta realizada por CivicScience a usuarios de la red social, el 36% de los usuarios diarios de Twitter manifestaron su conformidad con el cambio, mientras que al 27% no les ha gustado la propuesta. En tanto, el 43% de los usuarios normalmente activos apoyan el cambio, contra un 27% que asumieron una postura más crítica. 

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Por supuesto que nada está dicho aún y, para obtener métricas confiables se debe medir las interacciones y el uso de la red con el cambio ya implementado, si no, viviremos en la especulación. Lo único cierto aquí es que el rebranding en Twitter ya es una realidad muy próxima a nosotros.