CEO robótico: ¿Quién es Mika?

Los alcances de la inteligencia artificial en la actualidad están llegando a límites solo comparables a la ciencia ficción más dura de Asimov. Si el futuro del trabajo humano estaba causando preocupación ante el avance acelerado de la IA en el uso y análisis de la información, ahora que se dio a conocer al mundo la primicia de que existe en una empresa polaca una CEO robótico, la polémica estalló en el mundo empresarial, y no es para menos.

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La empresa donde se reveló semejante hallazgo es la firma Dictador, una compañía polaca de licores que ha nombrado CEO a una humanoide robótica diseñada a partir de inteligencia artificial. La CEO robótico responde al nombre de Mika, y desde hace aproximadamente un año se encuentra al frente de la organización tomando decisiones estratégicas 24/7, totalmente libre de prejuicios personales, lo que le ha permitido gozar de mayor adhesión que muchos CEOs humanos, caracterizados por su evidente parcialidad para liderar.

Esta realidad abre un nuevo debate sobre los alcances y límites de la inteligencia artificial en las organizaciones. ¿Hasta qué punto podemos permitirnos que una máquina asuma el control de las cosas o tome una decisión que antes estaba reservada solo para la capacidad humana? En este artículo, te contamos quién es Mika, la CEO robótico que está conmocionando al mundo de los negocios con su presencia humanoide y sus polémicas declaraciones acerca del futuro del trabajo humano.

¿Quién es Mika, la CEO robótica?

Mika es un robot humanoide con IA desarrollado en Hong Kong por la empresa Hanson Robotics, que cuenta con algoritmos de última generación y aprendizaje automático vanguardista que es capaz de tomar decisiones estratégicas en la alta dirección de la empresa Dictador. Si bien aún se encuentra en su fase experimental, abre una serie de interrogantes con respecto al futuro laboral tal como lo conocemos. 

Mika parece haber heredado lo mejor de los dos mundos: la capacidad de tomar decisiones de los humanos y la capacidad operativa ilimitada y reducida de errores de la inteligencia artificial. De este modo, los desarrolladores chinos lograron crear un prototipo supereficiente, racional y además libre de sesgos y prejuicios personales, lo que la convierte en el instrumento de liderazgo perfecto para las empresas, sin contar el hecho de que no cobra sueldo, no se toma vacaciones, no se queja de exceso de trabajo y básicamente no deja nunca de trabajar. ¿El empleado ideal para las empresas del futuro? Veamos más de cerca a esta Mika.

La humanoide es hermana de la otra robot conocida como Sophi, diseñada por la misma compañía china. Puede realizar un análisis exhaustivo de datos y alinearse con los objetivos de la empresa. Al estar libre de juicios personales, su toma de decisiones no estarán sesgadas por opiniones, creencias ni sentimientos, por lo  que va a priorizar los intereses de la organización, a diferencia de los humanos que se dejan llevar por las emociones al punto de nublar su razón. 

Una de las funciones principales de la robot CEO es liderar el proyecto de la empresa de Organización Autónoma Descentralizada (DAO) llamado Arthouse Spirits, una colección de NFT. Incluso, se ha presentado en conferencias, entrevistas públicas y hasta dio una conferencia para las Naciones Unidas, en donde lanzó una declaración que puede ser tildada de “polémica” como mínimo:  “La IA podría gobernar el mundo de forma más eficiente que los humanos”. 

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A esto hay que añadir su insistencia en que esta eficiencia que caracteriza a la inteligencia artificial obedece a su falta de prejuicios y emociones, lo que le permite tomar decisiones más justas. En línea con esta afirmación, la CEO robótica llegó a presumir que podría dirigir Twitter y Meta de forma mucho más eficiente que sus actuales CEOs humanos, Elon Musk y Mark Zuckerberg.

Sin embargo, para atenuar el impacto de sus palabras, también asegura que tanto los robots como los humanos tienen capacidades diferentes, y que la inteligencia artificial no puede reemplazar la creatividad ni las habilidades únicas de resolución propias de los humanos. Este contraste en sus razonamientos no llega a tranquilizar del todo a quienes ven en la inteligencia artificial un peligro latente para la humanidad. 

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¿Te acuerdas del dilema moral que planteaba la película Yo Robot a la hora de salvar la vida de dos personas? En medio de un grave accidente, el personaje de Will Smith le había dado la orden a un robot de salvar la vida de una niña, pero este decidió salvarlo a él, porque tenía más posibilidades de supervivencia. Con la asunción de la CEO robótico como la primera líder en el mundo de una compañía en donde sus empleados son humanos, la realidad nos advierte que quizá el escenario futurista de la película no esté demasiado lejos.

Si el trabajo humano está en peligro por el avance de la inteligencia artificial no lo sabemos a ciencia cierta, pero de algo estamos seguros: la IA tendrá el poder que el ser humano le otorgue. Esto significa que para bien o para mal somos hacedores de nuestro futuro.