Netflix es considerado el principal servicio de entretenimiento por internet del mundo. Tiene una presencia en más de 190 países, en donde 125 millones de clientes tienen acceso y disfrutan de series de TV, películas, documentales y toda clase de entretenimiento en cualquier momento del día y solo a través de una conexión a internet.
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Y lo mejor de todo es que las personas pueden ver el contenido que desean cuando quieren, en cualquier dispositivo electrónico y sin anuncios publicitarios, que en una plataforma digital de estos tiempos es decir mucho. Además, cabe destacar que en pocos años ha cambiado la forma tradicional de ver televisión, porque básicamente es el público quien tiene el poder de elegir lo que ve dentro de un catálogo muy grande y diverso de opciones de programación que brinda la plataforma.
En este sentido, la compañía se destaca por romper paradigmas tradicionales de entretenimiento frente a sus competidores. La irrupción de nuevas tecnologías y plataformas ha sido aprovechada por Netflix como recurso para generar mayor impacto como un nuevo modelo de negocio disruptivo, que además ofrece un servicio de VoD ante sus suscriptores.
El objetivo de este artículo es explorar la evolución de Netflix y por qué su modelo de negocios es innovador y disruptivo. Conoce este nuevo caso de estudio semanal: conoce el caso Netflix.
Historia de Netflix: la evolución del modelo tradicional de entretenimiento al disruptivo
Netflix es una empresa estadounidense de entretenimiento y servicio por suscripción a la carta en streaming, fundada en 1997 en California, y que opera a nivel mundial. Su principal servicio es la distribución de contenidos a través de la plataforma online o servicio de vídeo bajo demanda para ser utilizado en computadoras personales.
Empezó como una compañía de alquiler de DVD que entregaba vía postal y circula un mito curioso alrededor de su creación. Se dice que cuando Reed Hastings alquiló la película Apolo 13, en la cadena de videoclubes Blockbuster, al devolverla con unos días de retraso, tuvo que pagar una multa de 40 dólares.
Resignado, Hastings decidió crear una cadena de videoclubes libre de multas y compromisos. Sin embargo, en el libro Netflixed: the Epic Battle for America's Eyeballs, el cofundador de la empresa, Marc Randolph, relata que la idea surgió a partir del deseo de iniciar un negocio de comercio electrónico que, finalmente, elegiría al DVD como su producto.
En resumidas cuentas, Netflix era un videoclub virtual en donde los clientes elegían las películas a través de una plataforma en línea y estas eran entregadas mediante el servicio de correo postal. Los suscriptores elegían entre varios títulos del catálogo y la empresa le enviaba los encargos que escogían uno por vez y siempre pagados.
Durante los primeros años y hasta aproximadamente 2002, la compañía se autoproclamaba el servicio de alquiler de vídeos más grande del mundo. Su nombre tiene su origen en “Net”, abreviatura de internet, y flix de “flicks”, forma coloquial en inglés que significa películas.
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Servicio de visualización vía streaming
En 2007, Netflix introdujo la primera transformación que se trataba de un servicio vía streaming, ya que se comenzaron a dar cuenta que el alquiler de videos por correo postal con los años iba a dejar de ser rentable y muy probablemente reemplazado por la descarga o vista online.
El objetivo de Netflix con el servicio de streaming era ofrecer una plataforma funcional en todo momento, que permitiera la visualización de una gran cantidad de personas al mismo tiempo, sin afectar la calidad de la imagen. Esto posiblemente fue pensado ante el temor de que se saturase la red de la plataforma que conectaba a millones de usuarios en todo el mundo.
De esta manera, Netflix se alía con los servicios informáticos de Amazon, otra plataforma muy popular en la actualidad que también difunde contenidos de entretenimiento y genera productos originales de su creación. A partir de este momento, la plataforma de Netflix cobró gran importancia y reconocimiento por el acceso ilimitado, personalizado y libre de publicidad que ofrecía.
Además, permitía crear distintos perfiles entre las personas que compartían la contraseña de una misma cuenta, situación que Netflix aprovechó para obtener diversos datos de esas personas y conocer mejor sus gustos. Una jugada maestra que puso a su favor la picardía de algunos clientes, si consideramos la paranoia de la fundida Blockbuster que perseguía con recargos a los clientes que devolvían tarde las películas.
Luego de que en 2011 iniciara con la producción de contenido propio -que lanzaría en 2013 con House of Cards- y tras la puesta en marcha de su estudio en 2016, Netflix se definía para 2018 ya como una "global internet TV network" o una cadena global de televisión por internet.
¿Por qué Netflix es un modelo de negocio disruptivo?
En primer lugar, definamos disruptivo. En economía, algo disruptivo produce una ruptura en el desarrollo de la actividad de un sector para propiciar una renovación radical, lo cual es justamente la hazaña que protagonizó Netflix al destronar al líder de los alquileres de video, Blockbuster, cuando presentó al mundo un nuevo modelo de negocio adaptado a internet y los contenidos online.
Por aquel entonces, Blockbuster parecía haberse quedado sin ideas, manteniendo a ultranza el modelo tradicional de alquileres en tiendas físicas, que cada vez menos adhesión tenía frente a las suscripciones y descargas de películas y series desde plataformas online. Realidad que el creador de Netflix supo aprovechar muy bien a su favor sentando las bases del negocio del entretenimiento más rentable de los últimos tiempos.
Entretanto, Blockbuster estaba en agonía, Netflix se hacía más poderoso por las debilidades de su derrotado competidor. ¿Y cuáles fueron esas debilidades que sirvieron de armas para el triunfo definitivo de Netflix? Existen dos principales: la comodidad del cliente y las multas por pagos atrasados.
Comodidad del cliente: pese a tener Blockbuster una enorme cantidad de sucursales de tiendas físicas disponibles para que sus clientes fueran a alquilar de manera presencial, poco a poco las personas encontraron cómodo y beneficioso encargar sus alquileres desde una plataforma digital. Además, los ejecutivos de Netflix comprendieron que se ahorraban mucho dinero en infraestructura al sostener su negocio virtual.
Multas por pagos atrasados: Blockbuster generaba una enorme cantidad de dinero con las multas de los pagos atrasados de los clientes. De hecho, en ocasiones llegaban a ser más elevados los cargos por las devoluciones atrasadas que el precio del alquiler en sí, lo cual propició una creciente desconfianza de la gente por este modelo de negocio que sobrevivía de los intereses.
En cambio, Netflix, advirtiendo esta debilidad, aplica otra estrategia que terminó de sepultar a Blockbuster: fomenta el alquiler ilimitado de contenidos, y no solo eso, decide no cobrar recargos por pagos atrasados.
No hace falta decir más de cómo terminó esta historia. Por si esto fuera poco, la época de la pandemia no hizo más que monopolizar la posición de liderazgo de Netflix, manteniendo a las personas expectantes de su programación.
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En palabras finales, el caso Netflix es la prueba viviente de aprovechar una oportunidad a partir de la detección de una debilidad en el modelo de negocio tradicional y hacer historia con un nuevo modelo de negocio disruptivo completamente basado en internet.
De esta forma, pudo superar con creces a su principal competidor Blockbuster, introduciendo las innovaciones y tendencias digitales que le proporcionaran una gran ventaja competitiva.
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