Dentro de la gestión de procesos, la trazabilidad es el proceso de seguimiento del ciclo de desarrollo de su producto. A través de la trazabilidad, es posible documentar cada etapa del proceso de producción, desde la llegada de las materias primas hasta la entrega de los productos terminados. Esta documentación puede ayudar a las empresas a retirar rápidamente productos defectuosos, optimizar su producción y cumplir con las normativas.
Debido a la mejora de la calidad de los productos y al aumento de la concienciación sobre la seguridad en los últimos años, la trazabilidad en los procesos ha ido aumentando en importancia y se ha extendido a una amplia gama de campos, como la logística, la electrónica, la alimentación y la farmacéutica.
El término trazabilidad está formado por “traza y capacidad''. Aunque su definición varía ligeramente según la industria, como la automotriz, la electrónica, alimenticia y farmacéutica, se define de la siguiente manera en la industria manufacturera:
Se registra la información necesaria, como fabricantes, proveedores y distribuidores. Esta información se rastrea en todos los procesos, desde la adquisición de materias primas y piezas hasta la fabricación, el empaquetado, la distribución y las ventas para garantizar que se puedan rastrear sus historiales.
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Perspectivas sobre la trazabilidad
Aunque hay varias formas de ver la trazabilidad, generalmente se puede dividir en dos perspectivas: la trazabilidad de la cadena y la trazabilidad interna.
1. Trazabilidad de la cadena de suministro.
El concepto general de trazabilidad en el mundo se aplica a la trazabilidad en cadena. La trazabilidad de la cadena significa que el historial desde la adquisición de materias primas y piezas hasta el mecanizado, la distribución y las ventas se puede rastrear hacia adelante o hacia atrás.
Los fabricantes pueden monitorear hasta dónde se han entregado sus productos (pueden rastrear hacia adelante), mientras que las empresas y los consumidores en el flujo inferior pueden entender de dónde provienen los productos en sus manos (pueden rastrear hacia atrás).
Esto proporciona a los fabricantes el beneficio de una investigación de causas más sencilla y una retirada de productos cuando se producen problemas inesperados con dichos productos. Los consumidores también pueden usar esto como punto de referencia para seleccionar productos altamente confiables, sin preocupaciones como el etiquetado incorrecto.
2. Trazabilidad interna.
La trazabilidad interna significa monitorear el movimiento de partes/productos dentro de un área específica limitada en una cadena de suministro completa, como una sola empresa o planta. Por ejemplo, una planta de ensamblaje de motores obtiene piezas de motores, como árboles de levas y pistones, de proveedores y las ensambla.
La gestión y utilización del historial de fabricación y los resultados de inspección de estas piezas por parte de la planta también pueden considerarse trazabilidad interna.
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Ejemplo de trazabilidad interna
Trazabilidad en procesos de fabricación
La trazabilidad en los procesos de fabricación es una actividad de recopilación y gestión de información sobre lo que se ha hecho en los procesos de fabricación desde la aceptación de materias primas y piezas hasta el envío de productos.
Para la trazabilidad en los procesos de fabricación, a cada producto o lote se le asigna un número de identificación, y luego la información, como los detalles del trabajo, los resultados de la inspección y las dimensiones, se vinculan a este número de identificación en cada proceso para que pueda utilizarse para el ensamblaje en un proceso posterior. El uso de esta información para el mecanizado contribuye a mejorar la eficiencia y la calidad de la producción/trabajo.
Importancia de la trazabilidad
Si ocurre un problema de calidad del producto, el fabricante del producto debe tomar medidas efectivas de inmediato. Una respuesta lenta o ineficaz por parte del fabricante creará una sensación de desconfianza entre los consumidores o socios comerciales, que incluso puede poner en peligro la existencia de la empresa.
Además, a medida que se implementaron leyes para proteger a los consumidores, la cantidad de empresas obligadas a retirar rápidamente sus productos debido a problemas ha aumentado cada año.
La trazabilidad se ha promovido agresivamente durante mucho tiempo en la mayoría de las industrias. Se utiliza ampliamente para prevenir problemas de recuperación, minimizar daños y extraer/mejorar desafíos de gestión, así como para garantizar una gestión de calidad. Sin embargo, es difícil comprobar los datos desde la fabricación hasta la entrega de productos al cliente, así como los desperdicios, que suman varias decenas de miles, y observar las leyes y reglamentos que cambian con el tiempo.
Además, la globalización avanza, mientras que la competencia en costos y plazos de entrega se intensifica en los últimos años, por lo que la importancia de la trazabilidad sigue aumentando. Existe una necesidad urgente de construir un sistema de gestión diacrónico desde una perspectiva global que cubra tanto el interior como el exterior de la planta.
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Beneficios de la trazabilidad en los procesos
Las organizaciones que comienzan a implementar la trazabilidad en los procesos pueden comenzar a aprovechar la comprensión y un control potencialmente mayor que tienen sobre cómo se fabrican y distribuyen sus productos. Pueden evitar fácilmente problemas con la fabricación y, cuando estos ocurren, resolverlos será mucho más fácil.
Los retiros de productos pueden ser una pesadilla, lo que genera costos terribles y daños significativos a la marca, la reputación y la participación de mercado de una organización. A continuación, enumeramos los principales beneficios de la trazabilidad.
- Análisis perfecto de la causa raíz: la trazabilidad hace que sea mucho más fácil identificar problemas potenciales antes de que se envíe un producto, predecir con precisión el alcance del problema y aislar su causa raíz.
- Mejora continua: la organización moderna es ágil y flexible. La trazabilidad fomenta la adopción de un proceso de fabricación ajustado que minimiza el desperdicio y fomenta la mejora en serie.
- Mapeo y optimización del flujo de valor: con un mayor control sobre el proceso de fabricación, las organizaciones pueden comprender mejor qué hace que sus productos sean únicos o exitosos y optimizar estos aspectos.
- Evitar los costos de la no trazabilidad: abundan las historias sobre fallas de productos que podrían haberse evitado o mitigado si se hubiera implementado un sistema de trazabilidad. Las organizaciones pueden evitar estos desastres asegurándose de tener un sistema sólido que cubra todo su proceso.
- Producción global efectiva: con la creciente globalización, las empresas ahora tienen que mantener cadenas globales de suministro, fabricación y distribución. Durante esos miles de kilómetros, hay muchas cosas que pueden salir mal. La trazabilidad ayuda a garantizar que el riesgo de desastre se mantenga al mínimo y proporciona las herramientas necesarias para cortar rápidamente los problemas de raíz cuando ocurren.
Conclusión
La trazabilidad en los procesos implica un seguimiento exhaustivo del ciclo evolutivo de un producto desde que se efectúa el pedido de materias primas para la fabricación hasta que el producto terminado está listo para ser entregado al cliente. Un sistema de trazabilidad eficiente logrará registrar un historial de todo el recorrido de un producto, a fin de identificar posibles contingencias durante esos procesos y tener la oportunidad de poder corregirlas antes de la distribución.
De igual manera funciona la trazabilidad en otros procesos que no incluyan la entrega de un producto sino de un servicio, puesto que la trazabilidad se trata básicamente de asegurarse de que las actividades se realicen y los objetivos se cumplan.
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