En los últimos dos años han cobrado relevancia en América Latina alrededor de 23.400 negocios startup, como se les suele llamar a las empresas emergentes valuadas en más de mil millones de dólares, como es el caso de MercadoLibre, Rappi, Nuvank y otras tantas que se están convirtiendo muy rápidamente en el nuevo boom de las startups en LATAM.
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De esta cifra sobresaliente, por lo menos 40 unicornios se destacan por haber escalado durante estos últimos dos años de pandemia y abrir el camino para que otras startup tengan las mismas oportunidades de crecimiento entre los inversionistas.
Según un estudio de Platzi denominado “El ecosistema startups latinoamericanas en etapa semilla para 2021”, numerosas startup funcionan como sectores de retail y logística, pero otros se manejan con servicios empresariales como la educación. En este artículo, justamente hablaremos sobre cómo la pandemia aceleró el boom de las startups en LATAM.
En primer lugar, debemos aclarar que si bien la pandemia aceleró el crecimiento de estos negocios emergentes, el fenómeno de las startups se estaba gestando desde mucho antes, aproximadamente unos 10 años atrás. Por lo tanto, deberíamos decir que la pandemia es responsable de haber acelerado un crecimiento que ya venía en proceso.
La realidad nos está demostrando que cada vez hay más inversión en estos proyectos precisamente porque muchos de los primeros unicornios como MercadoLibre generaron confianza entre los fondos de inversión. Esto permitió que luego otras empresas emergentes se animaran a invertir por la seguridad y garantía que estas primeras startups les estaban ofreciendo.
En consecuencia, Latinoamérica se está transformando en un laboratorio de entrenamiento, en donde las empresas invierten para ocupar un lugar entre las startups más importantes. En el mejor de los escenarios, se convertirán en unicornios con altas posibilidades de expansión hacia otros países fuera de LATAM.
Por otro lado, Luis Paredes Izaguirre, director del Centro de Investigación de Iniciativa Empresarial de IPADE, sostiene que no debe pasarse por alto el hecho de que muchos CEOs de estas empresas se formaron en universidades no latinoamericanas, como fue el caso de Marcos Galperín, que realizó un doctorado en Estados Unidos.
Esto no quiere decir que sea condición inherente hacer una carrera empresarial en el extranjero para triunfar en los negocios, sino que estas personas aprovecharon todos los recursos disponibles para comprender mejor el panorama actual del mercado sobre el cual erigir una base más sólida de su modelo de negocios.
Sin duda, invertir en formación profesional fuera del país les ha brindado herramientas más robustas a estos empresarios para lanzar sus proyectos con una visión y un objetivo mejor enfocados hacia el mercado. A largo plazo, los resultados saltan a la vista cuando estas empresas emergentes se convierten en exitosas startups.
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Un primer impulso fue lanzarse al mercado luego de invertir tiempo en formación y en llevar a cabo la estrategia de negocio, pero luego resta el asunto de mantenerse vigente frente al panorama actual de cara al futuro, puesto que en algún momento la nueva normalidad devendrá en normalidad y es posible que muchos consumidores vuelvan a las tiendas físicas.
Pero también es posible que sean más los consumidores que no vuelvan a las tiendas físicas y permanezcan comprando sus productos a través de los comercios electrónicos, a fin de recibir sus compras en sus propios hogares. Es evidente que resulta una alternativa más cómoda que no solo evita aglomeraciones y la circulación de COVID, sino que ahorra tiempo de espera en los centros comerciales físicos.
Por este motivo, si hablamos de los principales desafíos que deben enfrentar las startups en LATAM a partir del advenimiento de la pandemia y la nueva normalidad, podemos resumir los siguientes 3:
Para muchas empresas emergentes la irrupción de la pandemia, más que un obstáculo, significó una oportunidad de crecimiento para consolidar el negocio online que recién estaba empezando a dar sus primeros pasos. Como dijimos al principio, aceleró el proceso y las empresas que estaban surgiendo se vieron favorecidas por estas circunstancias ventajosas.
Ahora bien, el objetivo es mantenerse tras la pandemia, teniendo en cuenta que no durará para siempre y que tarde o temprano terminaremos conviviendo con el virus, las vacunas y los protocolos sanitarios. Por consiguiente, se espera que tras este boom de las startups en LATAM solo las que se adapten mejor a los cambios del mercado sobrevivan. Esto implica anticiparse a dichos cambios implementando estrategias dirigidas a las necesidades de los consumidores en cada momento.
Las necesidades de esta época pueden no ser las mismas de las que surgirán dentro de 3 años, para las cuales hay que prepararse entendiendo que habrá personas que seguirán comprando de forma online, pero también habrá otros que preferirán tener un contacto más cercano con el producto y el agente de ventas desde el inicio.
Frente a esta realidad, una modalidad híbrida de comercio electrónico y la habilitación de un local físico para las personas que compren de forma personal puede ser una buena medida para cubrir ambas necesidades.
Por otra parte, además de incluir una tienda física, otro desafío de las startups latinoamericanas es personalizar su negocio enfocándose en necesidades específicas del consumidor y de la época vivida. De este modo, las empresas deberían dar respuesta satisfactoria a las demandas de sus clientes generando productos o servicios que se adecúen a sus necesidades o problemas.
En plena época de innovación tecnológica, la personalización de los productos o servicios es la mejor alternativa para permanecer en el mercado y generar mayores ingresos. Las empresas que se resisten al cambio y no personalizan su negocio en beneficio de los clientes se terminan estancando. En la vorágine del mundo actual la gente busca inmediatez e innovación, y es eso lo que hay que brindarles.
Por último y en función de las necesidades de las personas, un tercer desafío puede ser agregar valor generando una perspectiva de mejora sustentable a nivel ambiental. Si buscamos mejorar la calidad de vida de las personas introduciendo al mercado productos o servicios sustentables, a largo plazo la mejora para el planeta se percibirá a nivel de recursos renovables.
Por ejemplo, reducir la cantidad de desechos no biodegradables como el plástico puede ayudar a detener la contaminación ambiental y al mismo tiempo, controlar las emisiones de dióxido de carbono generado por el excesivo derroche de recursos no renovables. Propiciar un modelo de negocio basado en la reutilización de ciertos materiales puede contribuir a preservar esos recursos, favoreciendo la sustentabilidad.
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En definitiva, si hay algo bueno que puede generar el boom de las startups en LATAM es la oportunidad de generar valor a partir de la innovación tecnológica. Ya que las herramientas tecnológicas bien empleadas representan una ventaja competitiva, dirigirlas hacia un modelo de negocio enfocado al cliente y que además sea sustentable permitirá a estas empresas emergentes convertirse en unicornios líderes del mercado.