Impuestos: ¿Qué influencia tienen la rentabilidad?

Los impuestos son un elemento importante que se debe considerar en las finanzas de las empresas. Asimismo, también se deben tener en cuenta para la hora de analizar la rentabilidad real de la misma. Hoy vamos a hablar sobre de los impuestos, su influencia en la rentabilidad de una compañía y dejaremos algunas estrategias para gestionarlos adecuadamente.

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Los impuestos y las empresas

Los impuestos son contribuciones obligatorias establecidas por el gobierno de un país que todas las empresas deben afrontar. El dinero recaudado a través de los mismos se utiliza para financiar el gasto público del Estado, como por ejemplo, infraestructura, educación, salud, etc. 

Hay diferentes tipos de impuestos, por lo cual no todas las empresas necesariamente tendrán que pagar los mismos, sino que puede haber variabilidad según cuestiones como tipo de actividad económica, monto de ingresos, volumen de ventas, etc. 

Algunos de los impuestos más tradicionales o comunes para las empresas, son: impuesto sobre la renta, impuesto al valor agregado (IVA), impuestos por empleados registrados, entre otros. 

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¿Cómo influyen los impuestos en la rentabilidad de una empresa?

Teniendo en cuenta todo lo detallado anteriormente, queda en evidencia que la rentabilidad de una empresa se ve directamente afectada por los impuestos que la misma está obligada a pagar. Es decir, las ganancias netas de una empresa recién se van a poder obtener una vez que se haya descontado todo lo correspondiente a la carga fiscal, y con este dato, se podrá conocer el nivel de rentabilidad. 

Algunos puntos en los cuales se puede apreciar la influencia de los impuestos en la rentabilidad, son:

• Reducción de ganancias netas: Ya lo mencionamos antes y es uno de los principales indicadores. Al monto de utilidad bruta se deben restar los impuestos para saber la ganancia real de la empresa. En caso de que los impuestos sean elevados, priva a la empresa la posibilidad de realizar diferentes acciones de crecimiento, como podrían ser reinversión, contratación de más personal, aumento de salarios u honorarios, etc. 

• Competitividad: Si las empresas tienen cargas fiscales demasiado altas en comparación de sus competidores, puede derivar en que las mismas se vuelvan poco competitivas, ya que, o deben elevar sus precios, o deben reducir gastos en materia de publicidad o marketing, y cualquiera de estas acciones va a afectar las ventas. Por ejemplo, muchas veces sucede que las empresas nacionales tienen dificultades para competir con productos importados, ya que, por sus elevados costos fiscales y de producción, no pueden igualar sus precios con los de productos externos. 
• Aumento de costos operativos: Los impuestos aumentan directamente el costo operativo de la empresa, y aquí, por tanto, se ven también reflejados los dos puntos anteriores: el aumento en los costos operativos reduce las ganancias y pone en juego la competitividad de la empresa. 

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¿Cómo gestionar de manera efectiva el impacto de los impuestos en la rentabilidad?

Debido a la influencia de los impuestos en la rentabilidad de una empresa, es crucial entender el grado de impacto que poseen y cómo gestionarlos adecuadamente para que eso no afecte a la viabilidad de la compañía.

Realizar una planificación financiera estratégica, contemplando las cargas fiscales, se vuelve una acción indispensable para toda empresa. En la misma, se deben incluir minuciosamente todos los costos asociados a la producción y funcionamiento general de la empresa. Esa planificación servirá para anticiparse y estar mejor preparados para afrontar las obligaciones fiscales

Asimismo, en esa planificación se deben incluir diferentes escenarios posibles, por ejemplo, si disminuyen los impuestos, tener planeado qué se puede hacer con ese excedente, si se lo destina a inversiones, adelanto de pagos, capacitaciones, etc. 

Y, por el otro lado, tener un plan de acción en caso de que las cargas fiscales sean superiores. En ese último caso, será necesario contemplar cómo y de dónde se van a obtener los recursos económicos faltantes, si se tendrá que recurrir a un préstamo o si se dejará un fondo de contingencia específico para esa posible situación. 

La importancia de la planificación estratégica, radica en evitar al máximo posible que el cumplimiento de estas obligaciones fiscales no afecte la operación diaria de la empresa, y por consiguiente, su rentabilidad. 

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Conclusiones

Los impuestos son un factor decisivo que influye en la rentabilidad de una empresa. Por tanto, llevar adelante una efectiva gestión de los mismos sin dudas va a ayudar a minimizar su impacto negativo y, a su vez, será muy positivo para aprender a detectar oportunidades que surjan para mejorar la rentabilidad. 

Es indispensable invertir tanto tiempo como dinero para poder armar y organizar una planificación financiera óptima de la empresa, de esta manera, los líderes a cargo se van a encontrar mejor posicionadas para cumplir con las exigencias fiscales sin descuidar lo más importante, la compañía y su rentabilidad.

¿Queremos saber, como llevas adelante la gestión de los impuestos para cuidar la rentabilidad de tu empresa? ¡Dejanos tu comentario!

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