La inteligencia artificial de las cosas (AIoT) es la combinación de la inteligencia artificial (IA) y la infraestructura del internet de las cosas (IoT). El objetivo de AIoT es crear operaciones de IoT más eficientes, mejorar las interacciones hombre-máquina y mejorar la gestión y el análisis de datos.
La inteligencia artificial es la simulación de procesos de inteligencia humana a través de las máquinas, especialmente, sistemas informáticos, y se utiliza normalmente en el procesamiento del lenguaje natural, el reconocimiento de voz y la visión artificial.
IoT es un sistema informático de dispositivos informáticos interrelacionados, máquinas u objetos mecánicos y digitales con identificadores únicos y la capacidad de transferir datos a través de una red sin necesidad de interacción de persona a persona o de persona a computadora.
Una cosa en IoT puede ser el implante de un monitor cardíaco de una persona, un automóvil con sensores incorporados para alertar al conductor cuando la presión de los neumáticos es baja o cualquier otro objeto al que se le pueda asignar una dirección de Protocolo de Internet y transferir datos a través de una red.
AIoT es transformador y mutuamente beneficioso para ambos tipos de tecnología, ya que AI agrega valor a IoT a través de capacidades de aprendizaje automático y procesos mejorados de toma de decisiones, mientras que IoT agrega valor a AI a través de conectividad, señalización e intercambio de datos. AIoT puede mejorar las empresas y sus servicios al crear más valor a partir de los datos generados por IoT. AI permite que el dispositivo IoT utilice los grandes datos recopilados para analizar, aprender y tomar decisiones mejoradas sin la necesidad de un ser humano.
En los dispositivos AIoT, la IA está integrada en componentes de infraestructura, como programas y conjuntos de chips, que están todos conectados mediante redes IoT. Luego, las API se utilizan para garantizar que todos los componentes de hardware, software y plataforma puedan operar y comunicarse juntos sin esfuerzo por parte del usuario final.
Cuando están operativos, los dispositivos IoT crean y recopilan datos, y luego la AI los analiza para proporcionar información y mejorar la eficiencia y la productividad. La inteligencia artificial obtiene información utilizando procesos como el aprendizaje de datos.
Los datos de AIoT también se pueden procesar en el borde, lo que significa que los datos de los dispositivos de IoT se procesan lo más cerca posible de estos dispositivos para minimizar el ancho de banda necesario para mover datos y evitar posibles demoras en el análisis de datos.
Los beneficios de AIoT incluyen lo siguiente:
Pero también hay instancias en las que AIoT puede fallar, provocando una copia de seguridad en la producción u otras consecuencias negativas. Por ejemplo, los robots de entrega autónomos que fallan pueden causar un retraso en la entrega de un producto; las tiendas minoristas inteligentes podrían fallar en el análisis biométrico de la cara de un cliente, lo que provocaría que algún cliente robara accidentalmente un producto; o un vehículo autónomo puede no leer su entorno, como una señal de alto que se aproxima, y causar un accidente.
Aunque muchas aplicaciones de AIoT se centran en la implementación de la computación cognitiva en dispositivos de consumo, a continuación se destacan varios ejemplos del uso más amplio de AIoT:
Con la integración de AI, IoT se crea un sistema mucho más inteligente. El objetivo es que estos sistemas emitan juicios precisos sin necesidad de intervención humana. Una de las mayores innovaciones posibles en AIoT es la inclusión de 5G. Esta tecnología está diseñada para permitir una transferencia más rápida de archivos de datos grandes en dispositivos IoT, a través de su mayor ancho de banda y menor latencia.
AIoT podría ayudar a resolver los problemas operativos existentes, como el gasto asociado con la gestión eficaz del capital humano o la complejidad de las cadenas de suministro y los modelos de entrega.
AIoT o inteligencia artificial de las cosas es una solución tecnológica que integra la inteligencia artificial y el internet de las cosas para proveer soluciones más eficientes a los clientes en distintos sectores de la industria. Su objetivo es mejorar las interacciones entre el humano y las máquinas, a fin de optimizar la gestión, el análisis y procesamiento de datos, así como de mejorar la productividad de todos los procesos de negocios para obtener resultados cada vez más rentables con menos interacciones de personal.