Comprender cómo administrar los niveles de existencias, calcular los puntos de pedido y cuándo reabastecer tu inventario garantiza que tu negocio adquiera una ventaja competitiva en su logística. Sin embargo, muchas empresas minoristas no prestan a sus puntos de pedido la debida importancia para gestionarlos adecuadamente.
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La gestión incorrecta de inventario puede tener consecuencias negativas, y la probabilidad de que esto suceda aumenta a medida que tu cartera va creciendo. Entre el cálculo de inventario para productos de temporada y el seguimiento del límite de efectivo para tus nuevos pedidos, la gestión de stock y la cantidad de pedidos futuros puede ser complicada.
Sin embargo, tener en cuenta los puntos de pedido y el stock de seguridad en tus cálculos de reabastecimiento te ayudará a administrar tanto tu inventario actual como la cantidad de pedidos futuros. La propuesta para este artículo consiste en explicar las características de este indicador, cómo se calcula y para qué sirve.
El punto de pedido es la cantidad mínima de unidades que necesita una empresa tener en stock para evitar el agotamiento de existencias y garantizar el cumplimiento de pedidos. Una vez que los niveles de inventario alcanzan el punto de pedido, esta acción activa el proceso de reposición para volver a encargar este artículo.
El objetivo final del punto de pedido es mantener una cantidad de inventario a un nivel que siempre pueda satisfacer la demanda del cliente sin tener más de lo que es realmente posible mover.
El punto de pedido debe incluir suficiente stock disponible hasta que llegue el nuevo stock. Este tipo de indicador es clave para que los propietarios de negocios determinen cuánto stock de seguridad debe tener una empresa a mano como amortiguador para el exceso de demanda.
Para calcular el punto de pedido, se necesita conocer la fórmula y las dos partes clave de la fórmula: demanda de tiempo de entrega y existencias de seguridad.
La fórmula utilizada para determinar el punto de pedido de inventario es relativamente simple. También juega un papel en el ámbito más amplio de la gestión de inventario .
Entonces, la fórmula del punto de pedido es demanda de tiempo de entrega + stock de seguridad. Por supuesto, debes averiguar cuál es tu demanda de tiempo de entrega y los números de existencias de seguridad para determinar un cálculo preciso. Comencemos primero con el inventario de seguridad.
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El stock de seguridad es como un fondo para días lluviosos. Es la cantidad de unidades de un artículo en particular que se guarda para evitar un desabastecimiento (quedarse completamente sin el producto). El stock de seguridad te protege en varios escenarios. Eventos meteorológicos catastróficos. Cambios repentinos en la demanda de un producto.
Si tus proveedores tienen problemas para cumplir con un pedido, ya sea por envío, fabricación o escasez de materias primas, el stock de seguridad garantiza que aún pueda cumplir con los pedidos si estos suceden mientras esperas que llegue el nuevo inventario. Incluso si eventualmente se agota tu stock de seguridad, tener ese margen puede extender tus ventas más allá de las de un competidor.
Al establecer un punto de pedido, buscas evitar tirar repetidamente de tu stock de seguridad. Si recurres permanentemente a tu inventario de seguridad por razones distintas a retrasos en la cadena de suministro o circunstancias imprevistas, es un indicador confiable de que tendrás que aumentar tus pedidos de reposición o reevaluar tus niveles de inventario de seguridad.
Comprar existencias adicionales cuando ya tienes muchas existencias disponibles solo generará un exceso de inventario, lo que aumentará tus costos de mantenimiento. Pero si esperas a que tus existencias lleguen a cero antes de realizar el pedido, es probable que pierdas ventas potenciales, lo que se va a traducir en clientes insatisfechos.
Si tu tiempo de entrega -el tiempo que tardan las existencias después de realizar el pedido- es largo, terminarás perdiendo más ventas. Sin embargo, si estableces un punto de pedido para el inventario puedes asegurarte de reabastecer en el momento correcto de satisfacer las demandas de los clientes sin quedarse sin existencias. En definitiva, puedes lograr la optimización de inventarios.
El establecimiento de los puntos de pedido garantiza que no te quedes corto para tu próximo inventario. Cuando existe un punto de pedido para cada artículo, puedes asegurarte de que tu empresa tendrá la cantidad de existencias adecuadas para satisfacer las necesidades de los clientes. En este sentido, podemos encontrar más beneficios en los puntos de pedido.
Cuando una empresa almacena materias primas o productos terminados, en exceso de lo que se requiere para satisfacer las demandas del consumidor, no es un uso prudente del capital. Con niveles de reposición, las empresas pueden comprender mejor las finanzas y les permiten tener un inventario mínimo en función de la demanda del consumidor.
Si bien es cierto que el exceso de inventario puede aumentar los costos de mantenimiento, tener menos inventario incrementa el riesgo de perder ventas y clientes, ya que los consumidores generalmente no suelen esperar mucho para recibir sus pedidos. Sin embargo, todo esto se puede evitar estableciendo niveles de pedido y manteniendo niveles óptimos de inventario.
El cálculo de los niveles de pedido está indiscutiblemente relacionado con el conocimiento de las tendencias del mercado que prevalecen en un período determinado. Cuando sigues de cerca y examinas el nivel de pedido de un producto, podrás evaluar la demanda de ese producto con mayor precisión en el futuro. También garantizas la seguridad de que has utilizado los recursos disponibles de manera efectiva.
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En síntesis, el punto de pedido es una métrica muy efectiva que sirve para calcular la cantidad de existencias mínima requerida de un inventario para evitar el agotamiento de stock y asegurar la entrega de pedidos. Este indicador permite obtener una estimación de la cantidad de existencias reales que hay en el depósito, así como los movimientos de estas a medida que salen para ser distribuidas a los clientes. Así, cuando calculas el punto de pedido te aseguras no quedarte sin productos disponibles para la entrega a los clientes.