En los últimos años, las empresas están experimentando un proceso de cambios revolucionarios, pasando de una situación de protección regulada a entornos abiertos altamente competitivos. Esta situación, de transformaciones constantes del ambiente de negocio hace necesario que las empresas, para mantener e incrementar su participación de mercado en estas condiciones, deban tener claro la forma de cómo analizar y evaluar los procesos de su negocio.
La medición del desempeño puede ser definida generalmente, como una serie de acciones orientadas a medir, evaluar, ajustar y regular las actividades de una empresa. En el mundo de los negocios existe una infinidad de definiciones al respecto. Sin embargo, no es una tarea fácil dado que este concepto envuelve elementos físicos y lógicos, dependiendo de la visión del cuerpo gerencial, de la composición y estructura jerárquica y de los sistemas de soporte de la empresa.
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Cuando nos referimos a indicador de gestión, hablamos de aquel dato que refleja cuáles fueron las consecuencias de acciones tomadas en el pasado en el marco de una organización. La idea es que estos indicadores permitan ayudarte a medir, controlar y mejorar el plan de acciones de la gestión de proyectos a tomar en el presente y en el futuro.
Es importante que los indicadores en la gestión de proyectos reflejen datos veraces y fiables, porque de lo contrario el análisis de la situación no será correcto. Por otra parte, si los indicadores son ambiguos o inexactos, la interpretación será complicada.
Lo que te permite generar indicadores en la gestión de proyectos es poder determinar si un proyecto o una organización son exitosos o si están cumpliendo con los objetivos. El líder de la organización es quien suele establecer los indicadores de gestión, que son utilizados de manera frecuente para evaluar desempeño y resultados.
Si no se mide lo que se hace, no se puede controlar y si no se puede controlar, no se puede dirigir y si no se puede dirigir no se puede mejorar. Esto es sumamente importante si quieres lograr que tu proyecto se realice exitosamente porque podrás establecer plazos y costos, sabiendo si estos se cumplen o no, y cómo anticiparte a los riesgos o desviaciones entre lo planificado y lo que en verdad realizas en el tiempo previsto.
En primer lugar, debes tener en cuenta los tres pilares de un proyecto. Estos son el alcance, el tiempo y los costos. El alcance determina el o los objetivos del proyecto, y constituye una de las instancias más importantes de la gestión. Poder medir el alcance del proyecto te permitirá evaluar el avance de las distintas actividades destinadas a cumplir el objetivo general.
El tiempo hace referencia a los plazos o periodos de tiempo establecidos para el proyecto y los costos el presupuesto requerido o planificado para la elaboración del mismo. Pero para que puedas medir estos procesos en función del tiempo y del costo, seleccionar los indicadores de gestión pertinentes te ayudará a controlar mejor el trayecto del proyecto con sus posibles riesgos, ya sea en retrasos o aumento en los costos.
Indicadores de gestión básicos que puedes implementar para medir, controlar y mejorar tu proyecto
No existe una regla definida en cuanto a determinar cuáles serán los mejores indicadores en la gestión de proyectos, ya que depende mucho del alcance de los objetivos (qué tan ambiciosos pueden ser), del tipo de organización, el equipo de colaboradores que te respalda, las tecnologías y presupuestos que manejas, entre otros factores influyentes.
Pero con esta guía puedes facilitar tus tareas de gestión de proyectos profundizando en aquellas instancias indefinidas o problemáticas, cuyas desviaciones (es muy factible que aparezcan en las tareas que no fueron debidamente planificadas), a fin de que obtengas un mayor control de estos procesos y una mejora en los resultados, así como en la optimización del tiempo. Todo es posible si quieres y haces que suceda.