Existen diversas razones por las que una empresa decide que es el momento de buscar inversores: aumentar las ganancias, proteger el capital financiero para el futuro, hacer crecer el negocio o elevar el posicionamiento de la marca. Dependiendo de cuál sea la razón que te impulse a sumar inversores, puedes establecer el mejor momento para empezar y qué acciones deberías implementar para acomodar tus finanzas a la nueva etapa del ciclo de vida de tu empresa.
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Pero no es lo único que debes tener en cuenta, también los tipos de inversores que hay en el mercado financiero y a los que puedes acceder, según las necesidades que te motivan a requerir sus servicios. En un mercado tan cambiante como el actual, las empresas, principalmente las más pequeñas y familiares tienden a ser más reacias a querer buscar inversores por el riesgo que implica a corto y mediano plazo.
Sin embargo, elegir a un inversor alineado con los objetivos de tu empresa ofrece mayores posibilidades de éxito que de riesgos asociados. Ya sea que tu empresa se encuentre en vías de expansión o de reestructuración de tu modelo de negocio, tener presente en qué momento es recomendable sumar inversores a tu organización puede ayudarte a allanar el camino que te conduce hacia el éxito de tus metas organizacionales. En este artículo descubre cómo hacerlo.
El momento más recomendable para sumar inversores en tu organización es cuando tengas un plan de negocios sólido y una comprensión detallada de tu industria y mercado objetivo. Pero antes de presentarte a los inversores, es necesario tener un panorama amplio de para qué necesitas el dinero y cuánto deseas recaudar. También debes tener en cuenta tu situación financiera, incluidos tus activos y pasivos actuales, como así también tus ingresos y gastos proyectados.
Esta información te ayudará a determinar cuánto capital puedes invertir a cambio de financiación. Una vez que hayas confeccionado tu plan de negocios y comprendas tu situación financiera, estarás en condiciones de contactar a inversionistas potenciales. Una de las mejores maneras de encontrar estos inversores es a través del networking. Asiste a eventos, reuniones y conferencias de la industria a la que pertenece tu empresa.
También puedes buscar listas online de inversores ángeles y capitalistas de riesgo. Una vez que logras fijar una entrevista con alguno de ellos, asegúrate de tener una presentación lo más detallada posible, que describa el plan de negocios y las proyecciones financieras.
Ciertamente, no existe un momento perfecto para empezar a buscar inversores. Sin embargo, existen algunas prácticas generales que puedes aplicar. En primer lugar, es importante tener preparado un discurso claro y conciso antes de sumar nuevos inversores, lo que implica haber elaborado el plan de negocios de manera efectiva y tener pleno conocimiento de tus necesidades y objetivos financieros. Es más probable que los inversores se interesen en tu empresa si ven un plan sólido.
Otro aspecto relevante es tener cierta tracción inicial antes de contactar a los inversores. Esto puede realizarse a través de clientes tempranos, cobertura mediática positiva o incluso un fuerte impacto en las redes sociales. Asimismo, es conveniente no esperar hasta encontrarse en una situación desesperante para buscar inversores, ya que ellos necesitan comprobar que puedes mantener tu negocio en curso para invertir en tu empresa.
A la hora de incorporar inversores, es recomendable contactar con ellos anticipadamente, con el objetivo de realizar cambios y corregir el rumbo de las acciones, si se detectan problemas o riesgos potenciales. Si bien no existe una regla estricta sobre cuándo es recomendable sumar inversores, teniendo en cuenta estas pautas, puedes correr con ventaja al momento de la negociación, a fin de que sea más factible una financiación adecuada para hacer crecer tu negocio.
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En el mercado financiero, existen diversos tipos de inversores según las distintas maneras de operar, las acciones que toma, el perfil inherente a cada inversor y el nivel de riesgo que asume al invertir. Algunos inversores son de tomar acciones arriesgadas, mientras que otros prefieren las inversiones a largo plazo y tienden a ser más cautos a la hora de decidirse a invertir su dinero en una empresa. A continuación, enumeramos los principales tipos de inversores que puedes encontrar.
Conservador: este tipo de inversionista no va a correr riesgos, por lo que elegirán los activos financieros que representen ganancias seguras y ofrezcan rentas fijas. La desventaja de este tipo de inversor es que genera una ganancia más baja en comparación a otros mercados. Además, invierten grandes cantidades de dinero a largo plazo.
Moderado: este inversor busca un equilibrio entre la seguridad y la estabilidad, aunque asume más riesgos que el inversor conservador. Esto le permite gestionar tanto activos financieros de renta fija como inversiones de mercados volátiles.
Agresivo: estos inversores se caracterizan por asumir grandes riesgos en inversiones. Generalmente, se trata de traders con más experiencia que pueden llegar a invertir hasta el 80% de su capital en mercados volátiles, pero que pueden ofrecer por esto ganancias mucho más rentables.
Inversor particular: persona física o jurídica que comienza inversiones por cuenta propia sin responder a ninguna entidad financiera. Su propósito puede ser el de aumentar su capital o bien ahorrarlo para que este no pierda valor.
Inversor institucional: incluye a varias personas que reúnen un capital para invertirlo de manera significativa para obtener mayores ganancias.
Estratégicos: estos inversores buscan agregar valor a las empresas en las que invierten. Son inversores que invierten a largo plazo y eligen los activos que ofrecen mayor seguridad.
Financieros: prefieren invertir y generar ganancias a corto y mediano plazo. No intervienen en una empresa en particular sino que operan en distintos mercados financieros a través de la compra de bonos, divisas, entre otros. Pueden asumir mayores riesgos y no temen a las pérdidas.
Family and friends: son los inversionistas que deciden invertir en empresas familiares, de amigos o de algún tipo de personas con las que guardan algún vínculo o parentesco. Son los menos especializados del mercado financiero y se destacan por realizar inversiones con cantidades reducidas de dinero. El capital invertido normalmente se orienta al crecimiento de una empresa familiar que recién comienza a operar.
Business angels: estos perfiles de inversores eligen invertir grandes cantidades de dinero en empresas jóvenes con gran potencial para obtener ganancias. Las empresas que obtienen la ayuda de estos inversores generalmente se convierten en startups y unicornios en el futuro.
Family office: este tipo de inversores es el especialista en gestionar negocios familiares y administrar activos de distintos mercados financieros, especialmente el de valores. Su objetivo es aumentar las ganancias a largo plazo para mantener el patrimonio familiar frente a las nuevas generaciones.
Capital riesgo: se trata de inversores arriesgados que buscan invertir en empresas que tienen un alto potencial de crecimiento.
Al considerar los distintos tipos de inversores que podemos encontrar en el mercado financiero, comprendes de antemano si las necesidades de tu empresa están orientadas a asumir riesgos para obtener mayores ganancias al final del día, asumir un riesgo moderado que garantice cierta estabilidad o que directamente el riesgo no sea una opción y prefieras contactar a inversores más conservadores.
Además, si tu empresa es familiar, tienes a los inversores que invierten en negocios familiares, desde los menos especializados, que realizan inversiones mínimas, hasta los más agresivos del mercado financiero, que buscarán impulsar el crecimiento de empresas con potencial de startups.
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En definitiva, no hay un criterio definitivo para determinar cuándo es recomendable sumar inversores a tu empresa, porque depende en gran medida del tipo de empresa que manejas, las necesidades que te motivan a buscar inversores y los tipos de inversores existentes en el mercado financiero para llevar a cabo la financiación que puede brindar la estabilidad, seguridad y crecimiento que potencie aún más el logro de tus objetivos. Sin embargo, con un plan de negocios bien trazado puedes atraer mucho más el interés de los inversores que necesitas.