Las empresas más exitosas no son las que venden mucho, sino aquellas que poseen equipos de colaboradores eficientes y productivos que aúnan sus talentos y habilidades en pos de un objetivo común, cuyos resultados son mayormente positivos. Un trabajo que se realiza donde hay un ambiente de confianza todos sus trabajadores están motivados para entregar lo mejor de sí, y eso se traduce en los mejores resultados.
Fomentar la confianza y la colaboración en equipo de modo permanente en una empresa no es tarea sencilla, ya que muchas veces los colaboradores no se encuentran lo suficientemente motivados para realizar todas las tareas que le corresponden y se le van asignando de forma eficiente. Esto influye en el rendimiento de los trabajadores, en los cuales podría generar frustraciones.
Sin embargo, la confianza y la colaboración en equipo son elementos fundamentales para la fidelización de los colaboradores, que a la vez propicia el incremento de la productividad dentro de la empresa. Para lograr esto, tienes que reflexionar sobre el tipo de líder que eres para tus colaboradores, y si ellos te consideran una figura de autoridad o autoritaria.
En el primer caso, es muy probable que ganarte su confianza no sea complicado, pero en el segundo caso, deberás replantearte si quieres ese tipo de liderazgo basado en el dominio a los demás, cuando es mucho más fácil conseguir un mejor desempeño si demuestras conocimiento pero también humildad. Es decir, si quieres lograr que tus colaboradores confíen en ti y trabajen en equipo, predica con el ejemplo trabajando a la par.
Por tal motivo, es necesario definir acciones o estrategias destinadas a fomentar esa confianza y la colaboración en equipo, para que toda la empresa se impregne de un ambiente armónico y comprometido de trabajo, en donde todos participen con ideas de mejora y logren afianzar su sentido de pertenencia.
A continuación te revelamos una serie de estrategias para fomentar la confianza y la colaboración en equipo que puedes implementar.
El trabajo en equipo es sumamente importante para el crecimiento de una empresa, porque ya sabemos la eficacia que nos brinda contar con la colaboración mancomunada de todos los trabajadores para lograr con éxito un propósito específico que beneficie a todas las áreas.
Para que esto sea posible, no solo debes ser su guía empresarial, sino que entre colaboradores debe prevalecer el respeto y asumir desde el inicio el compromiso que se les pidió cuando se unieron al equipo humano. Cualquier desavenencia entre alguno de ellos debe ser solucionada con buena comunicación.
¿Qué clase de líder quieres ser? Como apuntamos al principio, no es mejor líder quien manda sino quien sabe mandar, aquel que hace de su autoridad una docencia para su equipo de colaboradores, y la docencia es un servicio. Por lo tanto, el verdadero liderazgo se trata de servicio, es decir, tienes que ponerte al servicio de tu equipo de trabajo y no al revés.
Te están brindando su esfuerzo y talento, así que compénsalos con gratitud y beneficios, a fin de que estén siempre motivados, ya que de esa forma comprenderán que los valoras.
Ahora bien, si el clima laboral no es el mejor porque hay confrontaciones entre colaboradores, busca el tiempo para reunirte con ellos de manera individual y grupal para conocer las causas que desencadenaron el conflicto.
Una vez que ya sabes cuáles son acuerda soluciones con los involucrados, pero concede la libertad de que ellos mismos limen sus asperezas, y solo interviene totalmente si el conflicto pone en riesgo la estabilidad de la empresa.
Es común y humano desmotivarse en el trabajo, y esto suele ocurrir cuando la confianza y la colaboración en equipo se encuentran desgastadas o nunca existieron de verdad. Por esto es fundamental motivar constantemente a los colaboradores porque el desempeño en sus funciones mejorará notablemente si no están estresados o molestos.
Para lograr esto y mantenerlo en el tiempo, fomenta la comunicación buscando conocer en profundidad a tus colaboradores, a fin de poder congeniar de forma efectiva con el perfil de cada uno. Puesto que todos somos individuos únicos y tenemos personalidades distintas, analizarlos te dará una ventaja estratégica para tratar con cada caso y no morir en el intento.
Puede ser de ayuda solicitar a tus colaboradores que realicen test de personalidad para que te orienten sobre cómo establecer relaciones saludables con ellos y anticiparte a sus inquietudes y problemas, ofreciendo soluciones que refuercen la confianza y la colaboración en equipo.
Lograr tener una visión positiva de los fracasos es una de las tareas más difíciles de realizar, por la simple razón de que el fracaso es un golpe duro a la moral y el orgullo de cualquier persona. Sin embargo, esto no tiene por qué representar un obstáculo para rescatar algo bueno dentro de lo malo que nos sugiere la idea de fracaso.
En este sentido, más vale la pena arriesgar que no intentarlo, por más que los resultados no sean los esperados, ya que, de lo contrario, nunca sabremos si era posible lograrlo o no siguiendo determinado método.
Ahí reside el aprendizaje que puede aportarte el fracaso. Por eso, de ahora en adelante, mira esta eventualidad con otros ojos y comprende que ya no cometerás el mismo error dos veces porque ya sabes, y tu equipo lo sabe, que tienen que ir por otro camino.
Y finalmente la comunicación permanente es la base para mantener en el tiempo una buena relación laboral en toda la empresa. La comunicación resuelve conflictos, crea lazos, alianzas, y garantiza la continuidad de los ideales de una organización. No dejes de mantener el feedback dentro de la empresa y la confianza y la colaboración en equipo estarán garantizadas.
En resumen, para fomentar la confianza y la colaboración en equipo debes mantener una comunicación constante con todos tus colaboradores y ser un líder que esté al servicio de los demás, capaz de brindarles la motivación que necesitan para maximizar todo su potencial en función de alcanzar los objetivos que tu empresa persigue.