Cinco internos de la cárcel de San Andrés, Colombia, tuvieron la oportunidad de realizar la página web de sus artesanías y recibir una formación virtual en conceptos básicos de marketing y páginas web en un espacio que aportó a su motivación y aprendizaje.
La entrada a la cárcel de San Andrés no da espacio para ninguna buena impresión. Desde que se toma el desvío para subir a la loma, la zona industrial de la isla, se comienza a ver un paisaje deshabitado y aislado de las comunidades que se encuentran en esta isla. Luego de subir lo suficiente y pasar por el relleno sanitario, el acueducto y otras zonas deshabitadas se llega a la cárcel, un establecimiento relativamente pequeño que tiene a cerca de 300 internos locales y otros extranjeros que cumplen su condena en este lugar. Pero los delitos no son tan importantes, como es la diversidad de actividades que estas personas realizan para redimir tiempo y así lograr salir mas rápido. Desde capacitaciones hasta pintura y artesanía, estos internos se han concentrado en emplear su potencial y energía en capacitarse y producir artículos que son vendidos en toda la isla.
Pero además de estas conocidas actividades de aprendizaje y producción que tienen lugar casi que en cualquier centro de reclusión de Colombia, San Andrés ha sido uno de los establecimientos piloto en la implementación de un programa innovador llamado 'Teletrabajo para las personas privadas de la libertad', implementado por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de Colombia (MinTIC) (MinTIC), el cual ya ha capacitado como teletrabajadores a dos grupos de internos quienes adquirieron una formación en el uso de herramientas digitales, así como un certificado que nutre su perfil para cuando salgan al mundo laboral.
'Arte+Sano' y las clases con Andrés
A la espera de vacantes de teletrabajo apropiadas para este tipo de población, el MinTIC junto con DREW Marketing decidieron proveer un espacio de práctica y formación para un grupo de teletrabajadores certificados, que les permitiera practicar los conocimientos adquiridos en el uso de herramientas digitales, así como conectar esto con las actividades productivas que se desarrollan en el centro para incentivar a estos teletrabajadores a reforzar su proceso de resocialización por medio del uso de la tecnología digital. El ejercicio no se planteó con todas las respuestas listas para los internos participantes, sino mas bien se quiso que entre todos se construyera el tipo de actividad y las dinámicas grupales que mas se adecuaran a ellos bajo la interrogante de '¿Cómo se ven aplicando el teletrabajo dese la cárcel?'. Así surgió 'Arte+Sano', un ejercicio de un mes en donde ellos realizarían una página web para promocionar sus productos artesanales y que sería complementado con un curso virtual de cuatro sesiones en donde Andrés, de DREW Marketing, les enseñaría sobre el potencial que una herramienta como la pagina web tiene para promocionar productos físicos, así como otras herramientas de marketing digital a tener en cuenta cuando se quiere construir este punto de contacto.
Al igual que el ejercicio, la primer sesión comenzó con un interrogante para los internos participantes: ¿Cómo se imaginan la promoción de su página web? Y en respuesta a esto surgieron ideas como el establecimiento de alianzas con fundaciones y el uso de storytelling para incluir su condición de privados de la libertad como generador de valor para sus productos. Las sesiones siguientes fueron encuentros virtuales muy amenos entre los internos y Andrés, en donde se discutió sobre el uso de redes sociales para potenciar el negocio, cómo un servicio al cliente efectivo puede generar más clientes, mientras que los internos le enseñaron a hablar un poco de colombiano.
Marketing digital y diseño web para la resocialización
Mas allá del componente académico del espacio, la mayor ganancia para este grupo y para el programa fue el de experimentar un espacio de resocialización diferente. En los centros de reclusión se llevan a cabo muchas actividades con este fin, pero este ejercicio ayudó a repensar procesos de resocialización que estén apoyados en el uso de las tecnologías digitales. Y es que un computador no sólo agiliza la digitación de un texto o permite hacer cálculos de forma más rápida, sino además puede conectar a estas personas con el mundo exterior en un ambiente controlado pero informal. Son estas dinámicas las que les otorgan a los internos un rol más activo en su proceso de resocialización, un rol que exige de su autonomía para organizarse entre ellos, producir contenidos valiosos y apoyar a otras personas en su comunidad para lograr un objetivo.
Prospectiva del proyecto: ¿Y ahora qué?
El ejercicio de 'Arte+Sano' terminó en el tiempo estipulado, pero aunque este haya terminado, este queda como evidencia del potencial que tienen los internos capacitados para organizarse y generar dinámicas de teletrabajo y formación virtual efectivas y llevaderas. Además este es la prueba que se pueden establecer procesos de comunicación con expertos, profesores y otros actores externos al centro y al país, para brindar más valor a cualquier actividad que se realice para esta población.
El panorama a futuro aún no es muy claro, y es precisamente porque hay muchas posibilidades de actuar con los recursos que han quedado instalados en este y otros 5 centros de reclusión de Colombia. Tal vez podrían ser talleres de escritura, publicaciones virtuales de circulación periódica, nuevos cursos en-línea o de pronto, un contrato con una empresa externa, siendo estos sólo algunos ejemplos de las oportunidades que se pueden desarrollar para esta población con ayuda de las tecnologías digitales. Lo que si es claro es que hay mucho potencial en los internos y las herramientas para repensar escenarios, proveer segundas oportunidades y generar espacios de participación constante para una población que está permanentemente aislada del mundo exterior.