Todas las empresas desean producir cada vez más y que su producción se traduzca en ganancias que las hagan más competitivas. Pero a veces, en el ímpetu de proveerse de las mejores materias primas para abastecer la producción en serie, no siempre es garantía de que los resultados serán los esperados en comparación con los costos invertidos.
Los costos de producción son costos que pueden estar asociados directa o indirectamente con la producción o entrega de productos o servicios.
Incluyen el material que compras para fabricar tus productos, los salarios, los impuestos y los beneficios adicionales para los colaboradores involucrados en la producción de los bienes que vendes, los costos de envío para llevar el producto a tu cliente y cualquier otro gasto directamente relacionado con la fabricación de tus productos.
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Teniendo en cuenta esta variable, seguramente te estarás preguntando cuánto produce tu empresa en relación con los costos de producción, y si los resultados de esta ecuación costos/producción son rentables para tu empresa. Para responder a esta pregunta, en primer lugar debes calcular la capacidad productiva de tu área de producción.
Este cálculo se realiza en todos los sectores industriales y constituye una herramienta básica para comprender el potencial de generación de valor para tu empresa.
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Si la capacidad productiva es inferior a la demanda, se pierden oportunidades de ventas. Ahora bien, si por el contrario, su capacidad de producción es muy superior, la empresa corre el riesgo de sufrir con existencias paradas, maquinaria ociosa y fuerza de trabajo desperdiciada.
Para saber cuánto produce tu empresa, debes atender a tres métodos de análisis y medición: capacidad instalada, capacidad efectiva y capacidad realizada.
La capacidad instalada consiste en el cálculo de la máxima productividad de tu empresa, si se utilizara toda la maquinaria disponible las 24 horas del día de manera ininterrumpida. Para tener un número exacto, tienes que medir cuánto tiempo se gasta para producir determinado producto y multiplícalo por la disponibilidad de un día entero.
Hace referencia a la forma en que tu empresa es capaz de generar producción, en función de la disponibilidad de mano de obra, aunque enfrentando problemas de mantenimiento de las maquinarias o fallos en los procesos productivos, debido a materiales de baja calidad.
Remite a la cantidad de cálculo que se generó en un periodo anterior, teniendo en cuenta todos los eventos inesperados que podrían haber afectado la planta de producción de tu empresa.
Además de calcular cuánto produce tu empresa, es importante que la parte logística sepa cómo gestionar la capacidad productiva, a fin de no desperdiciar recursos con el exceso de productividad. Existen dos formas fundamentales para obtener este control de producción: acción y demanda.
La técnica que limita la capacidad de producción de la acción es simple: si la cantidad de un producto en el inventario alcanza un determinado valor por la gestión, la empresa toma medidas inmediatas para reducir la capacidad, generando espacios libres para los trabajadores.
Si los inventarios son completos, esto significa que el mercado no es tan exigente y puede implicar una pérdida considerable continuar con tan alta producción.
Dado que la técnica de limitar la capacidad de producción por la demanda consiste en observar el mercado y ajustar la generación de valor de acuerdo con las necesidades reales del público consumidor. Por lo tanto, es importante lograr la alineación con el equipo comercial, que es el responsable de brindar un punto de vista estratégico sobre las ventas.
En algunos casos, puede valer la pena incluso liquidar parte de la maquinaria y reducir la capacidad productiva instalada, para minimizar pérdidas con la ociosidad.
Además de ser importante para evitar desperdicios, el control de la capacidad productiva también es necesario para atender las exigencias del mercado. Si la demanda es mayor de lo que la empresa puede generar, está perdiendo oportunidades de ventas y compradores.
En este caso, es imperioso aumentar la capacidad productiva, lo cual puede hacerse de diversas formas. En compañías más escalables, es posible realizar este ajuste con más facilidad, mientras que en otras empresas, este aumento debe ser cuidadosamente planificado, pues representa una inversión razonable.
Una de las formas más objetivas para aumentar la capacidad instalada es mediante la mejora del ecosistema tecnológico de tu empresa con una maquinaria más eficiente, rápida y robusta, que puede aumentar la cantidad de fabricación de un producto a la vez.
Además, con máquinas nuevas, es muy probable que los costos de producción y mantenimiento se reduzcan considerablemente y los tiempos de los procesos también.
En las fábricas que aún no funcionan las 24 horas del día, crear un cambio de más puede representar una estrategia para reducir la inactividad de la maquinaria y la expansión de la producción en serie. Pero es fundamental equilibrar los costos de producción con la fuerza de trabajo extra y el resultado financiero que será generado.
Otra manera directa de mejorar la capacidad productiva de tu empresa es a través de una inversión en infraestructura. Por ejemplo, con la apertura de otra Unidad o la expansión de la planta con más colaboradores y máquinas.
Como notarás, es muy importante calcular los costos de esa inversión para entender en cuánto tiempo se pagará y si realmente vale la pena.
En la industria, las paradas no planificadas para el mantenimiento correctivo son uno de los principales contratiempos para la productividad. Con una cuidadosa planificación de mantenimiento predictivo y preventivo, se puede minimizar estas interrupciones y aumentar la capacidad de producción de manera significativa.
Puede ser una decisión acertada utilizar un ERP para administrar con efectividad los procesos de mantenimiento.
Tercerizar las actividades de soporte y enfocarse en el núcleo empresarial de la empresa puede ser una forma efectiva de aumentar la productividad o, al menos, de reducir los gastos de tu industria.
Contratar a socios expertos para asumir tareas que escapan a la propuesta de valor de la compañía es algo que amplía el foco del equipo y, muy probablemente, mejora los resultados de esas actividades tercerizadas. Además, reduce significativamente los costos.
Por último, un medio eficaz de aumento de la productividad es con capacitaciones que desarrollen las habilidades del equipo. Con el entrenamiento técnico y de seguridad adecuado, se puede maximizar la capacidad productiva, reducir las pérdidas por fallos y minimizar el tiempo de inactividad causados por accidentes.
En conclusión, si te preocupa cuánto produce tu empresa, con esta resumida guía puedes calcular tu capacidad productiva actual, detectando las posibles fallas que permitirá aplicar mejores prácticas estratégicas orientadas a mejorar los procesos productivos. De este modo, la eficiencia adquirida en tu área de producción se traducirá en negocios más rentables, gracias a la gestión adecuada de productos en función de la demanda.