Cada vez son más las empresas en la actualidad que manifiestan una preocupación genuina por el medio ambiente y adaptan sus objetivos comerciales y estratégicos a las políticas de sustentabilidad vigentes. Esto se debe principalmente a un aumento de la conciencia del riesgo ambiental ante problemáticas como el calentamiento global, las emisiones de carbono y la deforestación, por mencionar algunas. Por eso no es casual que organizaciones de todo el mundo estén aplicando los criterios ESG.
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Pero, ¿qué son los criterios ESG y cómo ayudan a las empresas en el posicionamiento entre los consumidores con conciencia ecológica? Ya a partir de la década del 60 se comienza a vislumbrar un cambio de paradigma empresarial con respecto a la responsabilidad social en áreas como la seguridad ambiental. Esto propició que muchas empresas empezaran a incluir objetivos alineados con la sostenibilidad y el cuidado de los recursos naturales, como la economía circular, la creación de vehículos eléctricos, entre otras prácticas.
Desde 2020, con la pandemia, la preocupación por la sostenibilidad y el bienestar de las personas se incrementó aún más, por lo que nuevamente los objetivos de las empresas estuvieron enfocados a proteger la salud de las personas, incorporando la modalidad híbrida para reducir el estrés y la contaminación por uso excesivo del transporte. Por otra parte, la pandemia también impulsó un crecimiento de la digitalización, lo que permitió reducir el uso del papel en la documentación. En este artículo, abordamos el concepto de criterios ESG en la sustentabilidad y por qué son importantes.
Se habla de criterios ESG al enfoque que evalúa si las empresas trabajan en nombre de objetivos sociales que buscan generar un impacto ambiental positivo mejorando el entorno en el que vivimos. Estos objetivos están orientados a apoyar movimientos sociales que abordan problemáticas de diversidad, inclusión y equidad. Los criterios ESG se componen de 3 elementos.
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Incluir criterios ESG en tu empresa puede brindarte múltiples beneficios, no solo porque te permitirá mantenerte a la vanguardia de las tendencias sostenibles sino porque mejorará tu reputación frente a tus clientes, proveedores e inversores, por lo que probablemente aumentes tu cartera de clientes y el número de socios que quieran invertir en tus negocios, lo que impulsará un mayor retorno de la inversión. A continuación, enumeramos los principales beneficios de incorporar estos criterios.
Según la London School of Economics, las empresas con mayor satisfacción de los colaboradores alcanzan una rentabilidad entre un 2% y un 4% mayores a las empresas con puntuaciones más bajas. Esto significa que alinear los objetivos organizacionales con los criterios ESG permite que las personas trabajen mejor y se esfuercen por generar mayores ingresos a la empresa.
En la misma línea, las empresas con colaboradores altamente satisfechos con su trabajo aumentan el nivel de compromiso en un 14%. A la vez, este tipo de empresas que incorporan los criterios ESG presentan menos emisiones de carbono y su entorno en general es más flexible, priorizando las necesidades de las personas a las necesidades comerciales.
Con el crecimiento del activismo medioambiental y los movimientos o colectivos sociales en todo el mundo, las empresas que no manifiestan este grado de compromiso por el bienestar común pueden enfrentarse a una publicidad negativa en internet y obtener una mala reputación de parte de sus clientes, competidores e inversores. Por este motivo, es siempre una buena decisión implementar los criterios ESG en tu empresa para asegurarte de que tus objetivos de negocios están enfocados, no solo en obtener ganancias sino en hacer del mundo un lugar mejor para vivir.
Los consumidores no van a comprar a marcas o empresas que no se preocupan por cuidar el medio ambiente o buscan garantizar condiciones laborales decentes a sus colaboradores. Una de las razones de este comportamiento es que las personas tienden a ser idealistas con las marcas que consumen y los ídolos que siguen, por lo que si se sienten defraudados en sus ideales, serán los primeros en bajarlos del pedestal de donde los encumbraron en un principio. Lo mismo ocurre con los proveedores y socios estratégicos.
Los trabajadores tienden a buscar empresas que tengan responsabilidad social y mantengan una ética empresarial, incluso cuando el salario sea inferior al de otras empresas con políticas poco sostenibles o perjudiciales para el medio ambiente. En 2029, los millennials y centennials formarán el 72% de la fuerza laboral mundial. Estos trabajadores del futuro priorizan más las problemáticas medioambientales y sociales que sus predecesores, y esperan que sus líderes y empleadores desarrollen políticas amigables con el medio ambiente y demuestren su compromiso inclusivo por las personas de manera activa.
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En síntesis, los criterios ESG forman parte de la política ASG (medioambiental, social y de gobernanza), con el objetivo de integrar las preocupaciones por el medio ambiente, como la reducción de las emisiones de gases y la reutilización de recursos, la responsabilidad social garantizando la diversidad, la inclusión y la equidad, y las políticas éticas de gobierno. De esta forma, puedes complementar la actividad comercial y la obtención de ganancias con prácticas sostenibles que promuevan la conservación de los recursos y la protección del medio ambiente, como así también el bienestar de las personas a nivel global.