El mundo empresarial exige competencias de parte de sus colaboradores cada vez más completas para estar a la altura de los constantes cambios del mercado. Por este motivo las empresas se están preocupando por desarrollar una escuela de formación empresarial, más popularizada como “formación in company” para brindar capacitación actual a los trabajadores con el fin de prepararlos en el manejo de nuevas tecnologías y conocimientos que se añaden día a día a la jerga empresarial.
Ahora bien, ¿qué significa realmente la escuela de formación en tu empresa IT y qué ventajas y desventajas se ponen en evidencia tras su implementación? Todas estas cuestiones las estaremos analizando a lo largo de este artículo.
Hablamos de formación in company cuando las empresas trasladan la escuela o enseñanza académica al ámbito laboral. Dentro de la oficina o en el espacio de trabajo que tengan los trabajadores, se ocupa un tiempo de capacitación a cargo de profesores y personas especializadas en algún dominio del saber que sea particularmente importante para el crecimiento de la empresa.
En el caso de las empresas IT, la formación será orientada al aprendizaje de nuevas tecnologías, software e integraciones necesarias para la mejora de procesos y realización de actividades diarias. La relevancia de este método de formación es la enseñanza a medida. El profesor o coach buscará personalizar el curso en relación con los objetivos y necesidades de cada empresa.
Esto evita que se produzcan pérdidas de tiempo con conocimientos poco útiles, ya que los aprendices van a incorporar solamente los conocimientos y habilidades que necesitan en el día a día para llevar a cabo sus tareas con éxito. Además, los colaboradores aprenderán nuevos elementos para su formación profesional que les proporcionarán a nivel individual mayores oportunidades de crecimiento.
A partir de la formación in company, se terminaron los costos por despido o el reembolso de los costos de millaje, en algunos casos. Con solo pagar por la capacitación en sí, puedes ahorrar dinero y permitirte capacitar a más colaboradores de los que te habrías podido permitir enviando a un curso presencial. Como verás, es mucho más rentable obtener resultados de trabajadores mejor capacitados que despedirlos porque carecen de ciertas habilidades o conocimientos.
Cualquier buen educador en la empresa se ofrecerá a diseñar un programa a medida para satisfacer las necesidades de sus colaboradores y de la empresa para abordar los desafíos específicos a los que se enfrenta.
Es más sencillo calcular el ROI de la capacitación cuando se trabaja en estrecha colaboración con una empresa de formación que podrá garantizar factores como la cantidad de horas de los colaboradores que se ahorrarán al aprender nuevas habilidades en el corto y largo plazo. Impacto a largo plazo que, finalmente, los nuevos conocimientos y habilidades tendrán en tu organización.
Tanto si pierdes solo unos pocos días o unas pocas semanas, el horario de los colaboradores puede sobrecargarse al perder parte de su tiempo libre para viajar y asistir a un curso presencial. La capacitación específica de la empresa puede permitir que tu personal aprenda desde la comodidad del lugar de trabajo.
Incluso si adquieres un programa de capacitación en la empresa listo para usar, las sesiones de preguntas y respuestas en la capacitación pueden volverse altamente productivas rápidamente cuando tus colaboradores formulan preguntas para ayudar a resolver los problemas que surgen en tu negocio.
Debido a que los colaboradores están aprendiendo con sus colegas en la oficina, es más fácil para ellos pensar exactamente cómo los conocimientos que están incorporando se aplican a ellos y no es solo un ejercicio teórico que se olvidará cuando regresen de la oficina.
Si estuvieras enviando colaboradores a un curso abierto, puedes ayudar a contrarrestar los olvidos pidiéndoles que preparen preguntas relevantes para realizar en la capacitación y que luego presenten lo que han aprendido a sus colegas en la oficina.
Al elegir la formación específica de la empresa, los colaboradores y la empresa en su conjunto se perderán las ventajas de formarse con otros profesionales en un curso presencial. Las oportunidades de asociación, la percepción de su competencia e incluso el reclutamiento futuro para tu empresa pueden comenzar con la creación de redes en un curso público.
Si tienes una empresa especialmente joven, elegir la formación in company podría limitarte de hacer conexiones valiosas en la industria, lo cual no significa que no lo puedas intentar como recurso para tener personal más capacitado en las competencias más requeridas, y a partir de allí, expandir tus horizontes con formación fuera de tu empresa con profesionales de un nivel más avanzado.
¿Tus empleados están lo suficientemente entusiasmados como para aprovechar al máximo la formación específica de la empresa? Si la moral de tu oficina está sufriendo y la cultura de tu empresa se encuentra en crisis, elegir un entrenador interno que confíe en el compromiso total de tu personal puede ser una decisión arriesgada.
Alternativamente, los colaboradores que están muy comprometidos con sus puestos pueden sentirse tentados a responder correos electrónicos y manejar otros asuntos laborales durante la capacitación. En otras palabras, parte de tu personal podría distraerse fácilmente y no prestar la debida atención por “tener tareas pendientes” constantemente y la capacitación les está quitando tiempo.
A través de los participantes de otras empresas, llega información sobre diferentes técnicas, mejores prácticas emergentes y conocimientos sobre cómo otros han enfrentado los desafíos que tu empresa ha estado enfrentando.
Si bien los capacitadores experimentados cuentan con una gran experiencia, el conocimiento combinado que puede surgir de un grupo puede ayudar a tu empresa a escapar de tu propio conocimiento limitado y prácticas obsoletas. De ahí que involucrarse con otras empresas del sector puede ser beneficioso en el intercambio diario de conocimientos y experiencias ligadas a las vicisitudes del mundo empresarial.
Hoy en día, cada vez son más las empresas que implementan la formación in company para capacitar a sus colaboradores. Ejemplos concretos los encontramos en compañías de gran alcance como Axon, de Argentina, . Esta empresa comenzó dando cursos presenciales y en la actualidad es una de las más importantes brindando formación de coaching de manera online.
Otra empresa que ha crecido sostenidamente a lo largo de más de 80 años es Ricoh. En la actualidad, ha expandido su cartera de productos y servicios a desarrollar software y soluciones tecnológicas para empresas, ofreciendo cursos online y presenciales a sus colaboradores, por ejemplo, en armado y reparación de computadoras de la marca Dell.
Por consiguiente, su personal está altamente calificado para resolver eficientemente todos los problemas que pueden presentar los clientes garantizando una asesoría y servicio técnico habilitado y de confianza.