Los padres y estudiantes de hoy en día están evolucionando a la misma velocidad que el número de caracteres de Twitter se amplía, haciendo que los métodos tradicionales de marketing como el correo directo, la radio, el televisor o los folletos se vuelvan poco efectivos.
En esta era digital, en donde cada negocio necesita una presencia digital para sobrevivir en el mercado y enfrentar la competencia, no basta con sólo estar presentes en los canales más usados, es necesario ser estratégicos y elegir contenidos de calidad que atraigan a nuestros clientes hacia la propuesta de valor que tiene nuestra empresa. En educación esto cobra aún más sentido, sabiendo que hoy en día los estudiantes están más dispuestos de desplazarse si se trata de la mejor oferta educativa que puedan tener. Internet acortó distancias y acercó nuevos clientes que antes ni siquiera estaban en el radar de los centros educativos.
Uno de los elementos que ha cambiado la forma en que el sector educativo se relaciona es el inbound marketing en la educación. Este se trata de atraer clientes con contenido útil y relevante, agregando valor en cada una de las etapas de la experiencia del usuario y al centrarla en educación esto cobra mucho más sentido puesto que la elección del lugar donde se va a estudiar no es trivial, ésta es una decisión que definirá un futuro y por eso se debe estar seguro del valor que le aporta a nuestras vidas la institución escogida. ¿Cómo se hace para ver ese valor? ¿Cómo se está seguro de tomar la mejor decisión? Aquí les dejamos tres razones por las que una estrategia de Inbound puede ser valiosa para cualquier institución educativa que busque sobresalir de la competencia.
Todos sabemos que no se trata de tener una página web o presencia en redes sociales para atraer potenciales estudiantes. En estos medios es clave sobresalir de todo el contenido que se produce por montones diariamente. El inbound establece unas ‘personas’ que permite hacer un análisis de los usuarios previo a la producción del contenido para así limpiar lo sobrante y llamar la atención de los prospectos con base en lo que están buscando o los motiva.
Humaniza los procesos operativos
Seleccionar y aplicar a una universidad demanda una ejecución de procesos operativos que puede desanimar al usuario. En etapas de compromiso y cierre es clave un acompañamiento constante para asegurarle al cliente que está tomando la decisión correcta. Una estrategia de contenido omnicanal con base al conocimiento de usuario que se tiene, permite que este acompañamiento sea constante y pertinente.
Entrega el contenido adecuado en el momento adecuado
No se trata de enviar un mensaje a diario sólo por que lean el nombre de la institución cada vez que abran el correo. El manejo de puntos de contacto como el correo electrónico o las redes sociales no sólo requiere de constancia, sino de ser relevantes con el tiempo del usuario por medio de una entrega de contenidos en tiempo y lugar pertinentes. Una estrategia que se centre en los contenidos, por encima de los canales de comunicación, asegura que la pertinencia siempre sea una obligación.
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